Como el pasado jueves, las gemelas Sánchez Alayeto pasaron de ronda por la vía rápida. De hecho, más que en el encuentro de octavos. Si hace dos días solamente cedieron cuatro juegos, ayer, en el choque de cuartos ni eso. Solamente fueron dos, únicamente un juego al saque tuvo que irse al deuce y no tuvieron que levantar ninguna bola de rotura en su estreno en la pista central del Príncipe Felipe. Tras vencer por un doble 6-1 a Carolina Navarro y Cecilia Reiter, ahora llega el turno de la venganza ante Patricia Llaguno y Eli Amatriaín, las verdugas del año pasado. Misma ronda, mismas rivales y una espina clavada que, jugando como ayer, saldrá sin problema.

Tres torneos se llevan disputados esta temporada con el de Zaragoza y, en los tres, las gemelas se han visto con Navarro y Reiter en cuartos de final. En Badalona y Alicante sucumbieron al poderío de las zaragozanas y, en el duelo de ayer, llegaron a desesperarse. Mapi y Majo localizaron la brecha desde el primer momento del partido y la atacaron de lujo. Cargaron principalmente el juego sobre Carolina Navarro y buscaron con insistencia la potencia y el pasillo central. Eso provocó demasiados errores no forzados, 20 en total, que unidos a los 24 golpes ganadores de las gemelas fue una losa letal.

Comenzaron el partido con confianza, sin alardes atacando pero sin fallos de bulto. Eso les permitió a las Alayeto romper el servicio de primeras y que el set fuera rodado. Solo hubo un momento en el que pasaron apuros. En el sexto juego, la malagueña y la argentina levantaron un 40-0 en contra y llegaron a igualarlo. Pero nada, no había manera. Era la hora de cerrar el set al resto y hubo que esperar a la quinta bola de rotura para certificarlo. Cómo no, con un potente derechazo de Majo al centro que Navarro no pudo cazar.

En el segundo set tocaba sacar y el guion no se movió ni un ápice. Lo que funciona no se toca, así que el primer juego salió fácil, el segundo lo lograron romper en blanco, dando un golpe de autoridad y, el tercero, al saco también.

A las gemelas no les hacía falta ni hablar para entenderse, mientras que Navarro y Reiter cada vez se iban desesperando más. Solo algún punto resuelto con calidad dio alguna esperanza que fue liquidada de inmediato por las gemelas.

En el sexto juego, de nuevo, Mapi cometió un error y Majo otro, pero fue un espejismo. Cuatro puntos seguidos, otra rotura de saque y la oportunidad de cerrar el partido con Mapi al servicio. Como era de esperar, las zaragozanas lo sellaron, pudieron sacudirse la tensión y se plantaron en semifinales.

El resto de la jornada / Hoy, a las 10.00 horas, en la pista central del Príncipe Felipe, las rivales volverán a ser las mismas que el año pasado impidieron el primer trofeo en casa de las Sánchez Alayeto. Llega la hora de la redención ante Patricia Llaguno y Eli Amatriaín con excelentes sensaciones y con el público a favor.

El resultado más sorprendente de ayer fue el sufrimiento de Marrero y Salazar ante Ortega y Sánchez, ya que tuvieron que irse hasta el tie break del tercer set para ganar y hoy se enfrentarán a Triay y Sáinz, pareja que ganó a Ruiz y Bartomioli por 6-1 y 6-2.

En cuanto al cuadro masculino, Maxi Sánchez y Sanyo Gutiérrez, favoritos al triunfo, se impusieron sin problemas a Moyano y Capra en cuartos.