Serena Williams, Andy Murray y Kei Nishikori, K.O. Novak Djokovic, Rafael Nadal, Stan Wawrinka y Garbiñe Muguruza, tocados y cortos de partidos. Pocas veces tantas estrellas han llegado tan frágiles al Abierto de Australia, que abre sus puertas mañana. El 2018 empieza casi como acabó el 2017. ¿Volveremos a ver una final Federer-Nadal en Melbourne? ¿Habrá un nuevo campeón que ponga fin al dominio de la última década del Big Four? ¿Ha llegado la hora de las nuevas generaciones?

Mamá Serena Williams ha desistido de defender el título que ganó el año pasado embarazada de ocho semanas, a los 36 años, y Roger Federer, compañero de generación de la tenista estadounidense, se presenta dispuesto a defenderlo sin complejos. En su segunda juventud, el suizo busca su sexto título en Melbourne y el 20º Grand Slam de su carrera. El reto no será fácil pero las apuestas dicen lo contrario. El exnúmero uno es el mejor colocado. Una victoria suya se pagaba ayer a 2,87 euros, muy por debajo de los 5 euros que se daban por un triunfo de Nadal o los 7 si Djokovic es campeón. Más lejos aún aparecen Grigor Dimitrov (11 euros), Nick Kyrgios y Alexander Zverev (15 euros) o Del Potro (17 euros). El año pasado el triunfo de Federer aún parecía más difícil después de pasarse seis meses en el dique seco y en cambio se marchó de Melbourne Park con un triunfo que ni él soñaba en levantar 15 días antes.

LOS GRANDES ASPIRANTES

Ganar en Australia catapultó a Federer a una temporada «tan increíble como inimaginable», admitía el exnúmero 1 en el sorteo del cuadro del torneo masculino del pasado jueves. En el 2017 Federer ganó de corrido después en Indian Wells y Miami y remató seis meses de ensueño con su octavo Wimbledon. Solo Nadal aguantó el tirón y le plantó cara en un regreso igual de espectacular. Con el suizo mantuvo el pulso por el número 1 que el mallorquín se llevó al final al ganar Roland Garros y el Abierto de Estados Unidos.

Y este año de nuevo Nadal presenta su candidatura en Australia, donde ya arrebató el título a Federer en el 2009 y donde ha jugado tres finales más (ver gráfico). La duda no está en la pista sino en las articulaciones de esa rodilla derecha que le amargaron el final de la pasada temporada y la pretemporada de esta. Rafa renunció a la exhibición de Abu Dabi y al torneo de Brisbane pero su presencia en la exhibición del torneo de tie breaks en Kooyong ha tranquilizado a los organizadores .

Nadal quizás no está rodado como quería pero está listo para la lucha y, como él, Djokovic, con problemas en el codo y ausente de las pistas desde el pasado Wimbledon, que también ha asegurado que está «preparado» para el combate en un escenario sobre el que ha ganado seis títulos en los últimos 10 años. Jugadores como Grigor Dimitrov, Alexander Zverev, Nick Kyrgios o Dominik Thiem deberían tomar el relevo de Federer, Nadal, Djokovic o Wawrinka en un palmarés que han dominado desde hace una década sin contestación.

La calidad tenística de la nueva generación es indiscutible pero hasta el momento ninguno ha conseguido mantener la regularidad necesaria para optar a un Grand Slam. En eso también están por encima de ellos otros, menos jóvenes, que sí lo han conseguido como Juan Martín Del Potro o Marin Cilic, campeones del Abierto de EEUU, a los que no hay que olvidar esta vez.

La que un día fuera temida armada española llega a Australia más envejecida y con solo ocho jugadores en el cuadro masculino. A la sombra de Nadal (31 años), solo Pablo Carreño, actual número 10 mundial, con 26 años escapa del club de los treintañeros con Roberto Bautista (29 años), finalista hoy en el torneo de Auckland, y Albert Ramos (29 años) a un paso de cruzar la línea roja que ya superan de largo Feliciano López (36), David Ferrer (35), Fernando Verdasco (34) y Guillermo García-López (34). Y detrás de ellos, el vacío porque entre los 100 primeros de la ATP no aparece ningún español más.

LA SITUACIÓN DE MUGURUZA

Sin Serena Williams en la salida la lucha por el título será muy abierta en el torneo femenino. Simona Halep, número 1, es la favorita en las apuestas (8,50) aunque la rumana nunca ha ganado un Grand Slam. En la lista de candidatas aparece en la pole Garbiñe Muguruza. Campeona de Wimbledon el año pasado y número 3 mundial, la española llega muy corta de preparación (solo dos partidos) tras abandonar en Sydney por calambres y en Brisbane por un problema de abductores.

Junto a Muguruza y Halep las principales candidatas son Carolina Wozniacki, número 2 y campeona del Masters, Jelena Ostapenko y Sloane Stephens, ganadoras en Roland Garros y EEUU, sin olvidar a una tal Maria Sharapova, que vuelve tras cumplir su sanción por dopaje y que conquistó el título en Melbourne hace una década (2008).