No es bueno el recuerdo reciente que tiene el madridismo de Balaídos. Allí llegó el año pasado en la penúltima jornada con escasas opciones de ser campeón y esa falta de fe se consumó en una derrota por 2-0 que le apartó de la lucha por el título, con el agravante de que los empates del Atlético ante el Málaga y del Barça en Elche habrían plantado al conjunto blanco en la última jornada con opciones de conquistar la Liga.

Esa fe madridista en sus posibilidades de alzarse con el título es lo que evalúa esta noche el Celta (21.00 h. Canal+ 1), aunque la victoria del Barça ayer en Cornellá minara un poco su moral. No conocía aún el resultado Carlo Ancelotti cuando reconoció que el camino más corto del Madrid hacia un título pasa por Europa más que por España. "Es más complicado ganar la Liga que la Champions porque tenemos una desventaja de dos puntos", dijo el italiano, que recupera a Marcelo pero que sigue con tres bajas de peso, a las que ayer puso fecha de regreso: Modric podría estar listo para la última jornada ante el Getafe (y para la hipotética final de Champions); Benzema para Turín (5 de mayo) y Bale para visitar al Sevilla el sábado. Ancelotti también bromeó con la posición de Ramos. "Le he prometido que juega de delantero algún día, pero por ahora vuelve a la defensa".