Wembley, Londres y 1992 son los tres vértices del triángulo perfecto para entender la historia moderna del Barcelona, que empezó a construir su mística mucho antes, pero que se hizo mayor con aquel título, la primera Copa de Europa de la que hoy se cumplen 25 años. Nacido en 1899, el Barça vivió décadas entre la depresión y el derrotismo. Se relamió las heridas tras la final perdida en Berna en 1961 ante el Benfica (3-2). También lo tuvo muy cerca en 1986 frente a un rival teóricamente débil, el Steaua de Bucarest, en Sevilla. Hace hoy 25 años, en Londres el gol de Koeman inició una etapa de gloria.