El Málaga venció por 2-0 al Barcelona en partido de la 31ª jornada de Primera, con lo que el equipo de Luis Enrique Martínez perdió la ocasión de convertirse en el nuevo líder de la categoría. La igualada en el derbi Real-Atlético de Madrid (1-1) le había concedido la opción a los barcelonistas de situarse primeros si ganaban, ya que a igualdad a puntos su mejor coeficiente les otorgaba dicha plaza. En cambio, no pudo vencer en La Rosaleda y queda a tres puntos del Real Madrid, que tiene pendiente el partido aplazado en Vigo.
El exbarcelonista Sandro Ramírez inauguró la cuenta a los 32 minutos al marcharse en velocidad del defensa francés Jeremy Mathieu y batir por bajo al meta alemán Marc-Andre Ter Stegen.
El Barcelona trató de igualar en la segunda mitad, pero no pudo superar al portero camerunés Carlos Kameni en un periodo con polémica por un gol anulado al malaguista Juanpi Añor y un penalti a Sergi Roberto no concedido. El conjunto de Míchel padecía, pero también hacia sufrir a los azulgranas. Para colmo de males, a los 64 minutos el colegiado expulsó al brasileño Neymar por una acción sobre Diego Llorente.
El partido entró en un ritmo trepidante, enloquecido, e incluso el colegiado anuló un gol por presunto fuera de juego a Peñaranda en el minuto 70 que podía haber sido la sentencia. Míchel se decidió a refrescar el equipo con la entrada de Peñaranda por Juanpi y de Charles, que tuvo la sentencia y falló, por el goleador Sandro.
El Barcelona pidió un penalti sobre Sergi Roberto, que el colegiado señaló fuera del área, Messi se inventó varios pases que no acabaron en gol, sobre todo una a Sergi Romero que detuvo Kameni. Hasta que, con el Barcelona absolutamente volcado en busca de salvar al menos un punto, un nuevo contragolpe muy bien llevado por los malaguistas puso la guinda con la diana de Jony que da prácticamente la tranquilidad al Málaga e impide al conjunto azulgrana situarse como líder de Primera.
