Un gol de Luis Suárez y otro de Messi, antes de la primera media hora, dieron la vuelta a la eliminatoria contra el Espanyol, que no pudo hacer valer en el Camp Nou el 1-0 logrado en el partido de ida y que se vio dominado, de principio a fin, por el Barcelona. El Rey de Copas y vigente campeón estará en el bombo de semifinales por octava temporada consecutiva. Lo hará junto a Leganés, Sevilla y Valencia en un sorteo que se celebra hoy en Las Rozas desde las 13.00 horas

El Espanyol acusó el miedo escénico desde el inicio. A los hombres de Quique Sánchez Flores les quemaba el balón y, a los nueve minutos, el Barça ya había igualado la eliminatoria gracias a un testarazo de Luis Suárez, quien remataba de forma inapelable un centro desde la derecha de Aleix Vidal. La jugada la había empezado, cómo no, Messi, que esta vez no empezó el partido dosificando esfuerzos, como en otras ocasiones, sino que se puso al mando de las operaciones desde el inicio. Y así, en torno a la figura de astro argentino, construyó el Barcelona su fútbol, hilvanado a ritmo infernal, pero impreciso en los metros finales.

PRIMEROS MINUTOS INTENSOS

Sin embargo, aunque no olían el balón, los blanquiazules tuvieron, justo después del 1-0, dos ocasiones para igualar el partido: un disparo de Gerard Moreno que rechazó Cillessen y un remate desviado de Granero. Además, la suerte se alió con el conjunto azulgrana a los 25 minutos, cuando Messi recuperó una pelota en la frontal y armó su pierna izquierda para hacer el segundo, en colaboración con el visitante Naldo, que desviaba la trayectoria del balón para desgracia de Pau López.

El propio Messi pudo hacer el tercero antes del descanso cuando cazó, de forma acrobática, un centro de Sergio Busquets, pero cruzó demasiado su volea sobre la salida de Pau.

Quique movió el banquillo al descanso y sentó a Darder para dar entrada a Leo Baptistao, en busca de un tanto que, aunque no le alcanzaba para ganar el partido, le daba la clasificación. Pero volvió a ser el 10 del Barça quien rondó el gol a los diez minutos de la reanudación. Esta vez, el meta visitante sacó una mano para desviar el disparo de Leo. El Barcelona llegaba cada vez como menos insistencia y el Espanyol, aunque era incapaz de contragolpear con peligro, empezó a creerse que, si aguantaba el resultado hasta los compases finales, tendría su oportunidad de eliminar de la Copa a su máximo rival.

El juego local se revitalizó con el debut de Coutinho. El centrocampista brasileño sustituyó a Iniesta en el minuto 69 e hizo enloquecer al público del Camp Nou. Tras combinar con Messi, el ex del Liverpool dio un gol cantado a Luis Suárez, pero Pau adivinó el remate del uruguayo, primero, y el de Rakitic, en segunda instancia, evitando con una actuación antológica que quedara sentenciada la eliminatoria.

Messi y Luis Suárez lo intentaron de lejos, pero esta vez no vieron puerta. De nuevo Messi, a dos minutos para el final, pudo poner la sentencia al cabecear al palo un centro de Rakitic ante un Espanyol demasiado inofensivo en el tramo final.