La oferta de China de diciembre sería tan bienvenida ahora... El Barça no quiso que Arda Turan se marchara en el mercado de invierno por el temor a que faltaran recambios en el tramo decisivo de la temporada. Cerrada la campaña con el mal rendimiento del futbolista, la ausencia de títulos -la Copa no ha compensado la pérdida de la Liga y la eliminación en cuartos de la Champions-, sin el aval del máximo valedor del jugador, que era Luis Enrique, al delantero turco se le empujaría, de muy buenas maneras, hacia el Lejano Oriente. O más cerca, incluso. Al Arsenal, del que siempre se ha escrito que está interesado en Arda.
El Barça considera que Turan es un caso perdido y desearía desprenderse de él. Los ejecutivos no contemplan recuperar la inversión realizada en el 2015 por el exjugador del Atlético, que ya ha cumplido 30 años. En medio de las elecciones (el 6 de julio), Ramon Adell, el presidente de la junta gestora, fichó a Arda por 34 millones más 7 en variables. En la última convocatoria con Turquía, la pasada semana, agredió a un periodista por lo que fue expulsado. Catalunya Radio difundió que el futbolista podría haber perdido una gran cantidad de dinero en una de sus últimas visitas al Casino de Barcelona.
