Carlos Pauner ha vivido numerosas aventuras en la cadena del Himalaya. En sus más de 30 expediciones ha puesto muchas veces en juego su vida. A todos les viene a la mente el año 2004 en el que estuvo tres días perdido a casi 8.000 metros en el Kangchenjunga. En la tercera montaña del mundo perdió varios de sus dedos. En el año 2006 cayó dentro de un helicóptero en el campo base del Dhaulagiri y en el 2008 sufrió un principio de edema pulmonar intentando subir al Lhotse. Su colección de incidencias graves cuenta también con dos de sus costillas rotas cerca del campamento I del Shisha Pangma durante el otoño del 2009.

Pero las paradojas de la vida han querido que Carlos Pauner sufriera uno de sus más graves accidentes en un centro comercial de la capital aragonesa. Fue en Zaragoza, a última hora de la tarde del pasado lunes, cuando estaba escalando en el flamante rocódromo exterior de Puerto Venecia junto a Maite, su pareja y otros dos amigos. Por un problema con el exceso de cuerda sufrió un inesperado accidente con una caída de siete metros de altura hasta el suelo.

A las diez y media de la noche fue trasladado de urgencia al Hospital Universitario Miguel Servet y se le realizó una operación para estabilizar la pelvis que tenía totalmente rota. La operación se desarrolló satisfactoriamente y ahora Pauner se encuentra estable y consciente.

Está ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Zaragoza. Acompañan al ochomilista sus más allegados, entre ellos Maite, su novia, su hija Laura y sus padres. El jacetano ha tenido que suspender un viaje que tenía pensado realizar ayer martes a Alemania para visitar a su hermana.

EL DIAGNÓSTICO

Antonio Herrera, el jefe del Servicio de Traumatología del Hospital Miguel Servet, explicaba cuáles son las pautas a seguir a partir de ahora con la grave lesión del montañero zaragozano. "Tenemos que observar la evolución del enfermo para evitar las posibles complicaciones. Pauner está bien, pero el diagnóstico es reservado. Según su evolución, se tomará la decisión de realizar una segunda operación". La intervención se realizará con toda seguridad esta semana cuando se corte la hemorragia interna. En ella se fijará definitivamente la pelvis.

Los amigos de Carlos Pauner han seguido la evolución del montañero gracias a los whatsapps que les ha mandado Maite desde la clínica. "A las ocho de la mañana me ha mandado un mensaje indicándome el diagnóstico con la fractura de su pelvis. La recuperación será lenta y al principio Carlos no se podrá mover demasiado hasta que se suelde la fractura. Pero es duro y, conociendo su fortaleza, se recuperará antes de los plazos establecidos", dice Raúl Martínez, que estuvo la pasada primavera con Carlos Pauner en el monte Everest.