El mundo del deporte español se encuentra en shock tras el asesinato de Celia Barquín Arozamena, de 22 años, en una pequeña localidad del estado de Iowa, donde estudiaba la joven golfista española, campeona europea amateur del 2018. La policía de Ames, una población estadounidense de 50.000 habitantes, localizó ayer a primera hora su cadáver en el campo de golf de Coldwater, donde solía entrenarse.
La policía, que identificó el cuerpo como el de la joven universitaria y determinó que fue agredida y murió a consecuencia del ataque, detuvo poco después a un sospechoso, Collin Daniel Richards, de 22 años, acusado de asesinato en primer grado. Medios estadounidenses informan de antecedentes penales de Richards, entre ellos intimidación con arma peligrosa en el 2015 en una gasolinera del condado de Guthrie, donde intentó robar y amenazó con disparar a los empleados.
La familia de la joven permanece en España, en contacto con las autoridades españolas en Washington y con los investigadores a la espera de la autopsia de cara a la repatriación del cuerpo. «Estamos siguiendo el procedimiento paso a paso», dijo Andrés Barquín, hermano de la joven, que añadió que espera contar con más información tras la autopsia. «Ahora mismo estamos bastante destrozados, intentando asimilar un poco lo sucedido, y pedimos un poco de intimidad para sobrellevar estos días que están siendo bastante duros».
Andrés estuvo presente en el minuto de silencio que tuvo lugar en el Ayuntamiento de Reocín, de donde es la familia, y donde atendió a los medios de comunicación. «Por ahora lo que sabemos es que Celia había ido a entrenar por la mañana como muchos otros días y que alguien la atacó», explicó.
Nacida en Puente San Miguel (Cantabria), Celia Barquín era una de las jugadoras con más futuro del golf español. El pasado 29 de julio se proclamó campeona de Europa amateur, un trofeo que solo cuatro españoles habían conseguido antes (Carlota Ciganda, Belen Mozo, Luna Sobrón y María Parra). La próxima temporada esperaba hacer su debut como profesional.
La golfista compatibilizaba sus estudios de ingeniería civil con el golf en la Universidad de Iowa, que expresó sus condolencias en un comunicado. «Es una pérdida trágica y sin sentido de una joven con talento y de una aclamada estudiante», lamentó la presidenta de la universidad, Wendy Wintersteen, que anunció un homenaje para este sábado.
