Coutinho está ya muy cerca del Barça, que lo tiene todo a punto para presentar al jugador en el Camp Nou mañana, síntoma de que las negociaciones, todavía abiertas con el Liverpool, avanzan a muy buen ritmo para sellar definitivamente un traspaso que no bajará de los 100 millones de euros y que incluso puede sobrepasar esa cifra.

El club azulgrana, que desde hace días mantiene negociaciones al más alto nivel con el club de Anfield, ha presentado ya una oferta por encima de los 100 millones mientras que el mediapunta ha dejado claro a su entrenador, Jürgen Klopp, que quiere jugar en el club azulgrana porque considera que, tras cinco años, su ciclo en el Liverpool ha llegado a su final. Lo que también tiene claro Coutinho es que no forzará su salida hasta el extremo de solicitar el transfer request, es decir, evitar pronunciarse por medio de una carta firmada solicitando su marcha. El brasileño quiere jugar en el Barça, con el que ya tiene un acuerdo por cinco temporadas, pero desea que ambas entidades acuerden de forma negociada el traspaso.

No quiere forzar su salida, pero lleva días entrenándose a medio gas por un supuesto dolor de espalda. De hecho, el club ya ha avanzado que no entrará en la lista del primer partido de la Premier en Watford. Coutinho tampoco jugó el amistoso ante el Athletic el pasado sábado en Dublín.

El 10 de Anfield sueña con jugar en el Camp Nou, siguiendo la legendaria estela de brasileños que también vistieron la camiseta azulgrana (Romário, Ronaldo, Rivaldo, Ronaldinho…), el último de ellos, Neymar, del que posiblemente acabará heredando el dorsal 11 y buena parte del rol que desempeñaba la actual megaestrella del PSG en el once barcelonista. Coutinho, de 25 años, llegará para cubrir el vacío que deja Neymar siendo un jugador de características diferentes y, desde luego, menos espectaculares pero quizá similares en cuento a nivel de efectividad.

Coutinho también tiene regate, técnica, velocidad, buena visión de juego y un potente disparo con ambas piernas. Una evidente clase futbolística que se une a su polivalencia, ya que tanto le puede servir a Valverde como de interior, de mediapunta, su posición natural, o de extremo, aunque su tendencia innata es desplazarse hacia el centro. Ahora aterrizará en el Camp Nou en su plenitud futbolística y con el reto de demostrar que puede ser un buen complemento para Messi y Suárez.