Al día siguiente de que Cristiano Ronaldo colgase en su cuenta de Instagram una imagen con la leyenda «a veces la mejor respuesta es estar callado», todo el mundo asegura en Portugal que no hay posibilidad que la estrella blanca continúe en el Madrid la temporada que viene. El jugador, concentrado con su selección en Kazán a la espera de debutar mañana en la Copa Confederaciones ante México, no ha abierto la boca públicamente para confirmarlo, pero todo apunta a que se trata de una ofensiva real para abandonar de forma inopinada el club. O para aumentar su sueldo en la entidad madridista, siete meses después de haber renovado hasta el 2021, con el objetivo de compensar así la multimillonaria multa (de hasta 28 millones) que puede caerle por su presunto fraude a Hacienda.

El diario deportivo portugués A Bola afirmaba en su edición impresa de ayer que Ronaldo está decidido a abandonar el Madrid porque está «indignado» con la denuncia de la fiscalía, que le acusa de defraudar 14,7 millones de euros a Hacienda. El titular de portada no podía ser más contundente: «Cristiano Ronaldo quiere abandonar España». Poco después, el otro periódico deportivo de referencia en Portugal, Record, confirmaba que se trata de una decisión firme que ha comunicado a distintas personalidades que le han visitado en la concentración de la selección. «Cristiano Ronaldo no vuelve al Real Madrid», titulaba Record, que no da opción a que el club blanco pueda hacer recapacitar a su mediática estrella.

No hay marcha atrás, la decisión de CR7 es irreversible y ya se lo ha comunicado al presidente, según A Bola, que hace una semana publicó que un club europeo estaba dispuesto a poner sobre la mesa 180 millones de euros para llevarse al goleador blanco. Ahora asegura que la decisión de marcharse no tiene vuelta de hoja cuando hace unos días, antes de conocerse la denuncia, había apuntado a todo lo contrario.

Tranquilidad / La BBC, por su parte, informaba ayer de que una fuente del círculo más íntimo del jugador ha confirmado la firmeza de su decisión. «Siente que es honesto, que no hizo nada mal y no entiende lo que sucede. Está muy triste y muy molesto», habría dicho.

Florentino Pérez y José Ángel Sánchez, director general corporativo del Madrid, fueron puestos al corriente de la nueva situación por el propio Ronaldo poco después de que su nombre fuera puesto en solfa en todos los medios del mundo por la denuncia de la fiscalía, según informa Marca. Los dirigentes, tras valorar la situación, han reaccionado con tranquilidad e intentan reconducirla. Buscan que reconsidere su postura aunque sin perder de vista que puede tratarse de una maniobra calibrada para mejorar su contrato y compensar así la gran multa que tendrá que pagar. Además Ronaldo carga buena parte de la responsabilidad de sus problemas con Hacienda al propio club, al que acusa de no haber gestionado de forma conveniente su nueva situación tras el cambio de la Ley Beckham en el 2011.