La Real Federación Española de Fútbol nos ha obsequiado con la retransmisión en directo del sorteo del calendario de la Liga de Primera, más bien medio sorteo porque en el bombo solamente han participado la mitad de los equipos. En cambio se ha limitado a colgar en su web el calendario de la Segunda, sin más explicaciones.

No obstante, suponiendo que ambos calendarios se han confeccionado de forma análoga, podemos adivinar cuál habrá sido la asignación de números a los equipos de Segunda. Esta asignación en unos casos lo ha sido a petición previa de los clubs, y en otros se habrá realizado mediante un sorteo dirigido, en el sentido de forzar que el primer partido se juegue como local o como visitante según la petición del club afectado. Seguro que la numeración que figura en el cuadro adjunto habrá sido la asignación de números, que sirve para determinar la primera jornada.

La RFEF posee unas plantillas de manera que una vez decidida la primera jornada las demás se generan automáticamente. Esta generación se realiza de forma muy simétrica, lo que confiere a nuestro calendario de unas curiosas propiedades. Otras ligas de fútbol europeas no poseen esa simetría que tienen los calendarios de las ligas españolas. No es cosa de explicar aquí esa generación automática, pero sí dar cuenta de algunas de las curiosidades:

1. El equipo comodín es el número 22, el Valladolid. También se distingue por ser el único equipo que juega las jornadas 19 y 20 en casa.

2. Son equipos opuestos aquellos que simultáneamente no juegan en casa. Cada equipo tiene su opuesto. Se distinguen porque tienen números seguidos, empezando por número impar. Así, el opuesto del Zaragoza es el Valladolid, y el del Huesca es el Córdoba. Seguro que las parejas Rayo-Alcorcón, Reus-Nastic, Sporting-Oviedo y Albacete-Lorca son opuestos por la asignación previa de números, no por sorteo.

3. El Osasuna y el Barcelona B son los dos únicos equipos que nunca juegan dos jornadas seguidas en casa. Es porque les correspondieron los números 1 y 2.

4. Una de las cosas que los aficionados observan cuando la Liga se pone en marcha es que cada equipo tiene su anterior, es decir, un club juega con el equipo con el que su anterior ha jugado en la jornada precedente. Para confeccionar la lista de los anteriores, basta ordenar los equipos según su numeración, primero los impares y luego los pares, excepto el equipo comodín, que no tiene anterior. Por ejemplo, el anterior del Zaragoza es el Albacete y el siguiente el Barcelona B.

5. La lista de los anteriores es muy importante porque representa la sucesión de equipos con los que cada club va jugando conforme avanza la liga. Cuando según esa serie a un equipo le toca jugar consigo mismo es cuando aparece el comodín. Realmente es en esa serie en la que se fija el aficionado para decir que «el calendario es desfavorable porque en las próximas jornadas vienen equipos fuertes». Fijarse que la lista es la misma para todos los equipos, excepto para el comodín. Lo natural sería que en esa serie se fuesen alternando equipos fuertes, medianos y flojos, calificación que se debería extraer de la Liga anterior.

6. El Valladolid, como equipo comodín, a lo largo de la Liga juega con los equipos numerados de forma consecutiva, empezando por el 2, es decir, con el Barcelona, Sevilla At., Tenerife... Observar que el Valladolid jugará sucesivamente con todas las parejas de opuestos.

Lástima que la RFEF en la presentación del pasado sorteo del calendario no resalte estas propiedades de simetría que tienen nuestros calendarios. El resto de los calendarios consultados de países europeos son más bien anárquicos.