El voleibol español tiene un rey absoluto desde hace diez años. En esta década nadie ha ganado tanto ni tan seguido, hasta acumular 17 títulos en estas últimas diez campañas, como el CV Teruel. El viernes completó en Almería la mejor de todas sus temporadas en la máxima categoría -doce, puesto que ascendió en el 2006- con un triplete histórico. Este curso 2017-18 ha conquistado la Supercopa, la Copa del Rey y la Superliga con unos números de vértigo. Solo ha perdido un partido en toda la temporada. En sus vitrinas figuran ya 6 Ligas, 5 Copas y 6 Supercopas.

De esta forma el equipo turolense se ha convertido en el gran dominador del voleibol español en todas sus competiciones nacionales. En estos diez años ha ganado 6 Ligas, por las tres del Unicaja y una del Palma, 5 Copas, por las cuatro del Unicaja y una del Palma, y 6 Supercopas, por las 3 del Unicaja y 1 del Palma. Así, el club de la ciudad mudéjar acumula 17 títulos, siete más que el Unicaja Almería y 14 más que el Palma. Son los tres únicos clubs que han levantado un título en esta época. La del Teruel es una carrera meteórica hacia el éxito. Ascendió en el 2006 y, en su primera temporada, acabó décimo. Fue quinto en la siguiente y, a la tercera, se coronó con su primer título de Liga.

Después ha conquistado la Liga en los años 2009, 2010, 2011, 2012, 2014 y 2018, la Copa en 2011, 2012, 2013, 2015 y 2018 y, la Supercopa, en 2010, 2013, 2014, 2015, 2017 y 2018. Aún está lejos de los 11 títulos de Liga que ostenta el Unicaja Almería, pero ha sido el único capaz de superarle en los últimos años. La última década es suya, los últimos diez años llevan el nombre de Teruel grabado a fuego. Así lo reconoce la consejera de Educación, Mayte Pérez: «Este equipo sigue marcando un hito en la historia de Teruel y de Aragón. Muchas felicidades por ese triplete a un club humilde que lleva el nombre de la ciudad de Teruel y de toda la comunidad allá donde va».

La plantilla aragonesa llegó ayer por la tarde a Teruel, aunque los festejos oficiales quedan para el 2 de mayo. Ese día el equipo turolense seguirá un camino que ha recorrido ya prácticamente todos los años de los últimos diez. Será recibido en el Ayuntamiento de la capital, ofrecerá los títulos a la patrona en la Catedral y lo celebrará con todos sus seguidores en un acto popular en la plaza del Torico, que volverá a lucir la bufanda del equipo que ha puesto a Teruel en lo más alto del mapa. Que ha convertido a la ciudad aragonesa en la capital del voleibol español.