El Hotel Palafox de Zaragoza fue el escenario del coloquio organizado por la Asociación de Directivos y Ejecutivos de Aragón (ADEA) con el propósito de analizar la importancia del deporte base en el desarrollo de las personas. En la ponencia presidida por Salvador Arenere, presidente de la organización, se analizaron las entrañas del deporte, poniendo a examen la debilitada salud que atraviesan muchos de los equipos que componen la élite zaragozana.
Arturo Sisó, director de comunicación del Tecnyconta Zaragoza, explicó que se sustentan gracias al apoyo de sus abonados y sus patrocinadores. «No queda otra que habituarnos a buscar otras vías para subsistir ante la falta de ingresos. Queremos ser sostenibles con la producción propia», aseveró.
Antonio Orús abanderó la imagen del Club de Baloncesto Peñas, que milita en la LEB Oro. Destacó la labor del deporte como elemento de cohesión social. «Es un componente indispensable en la integración social, hay que invertir en el deporte para educar y formar», añadió. Esta función pedagógica está presente en las categorías inferiores, de la cual se nutre el Club Hielo Jaca. Erik Bastilde aseguró que «sin la base no podríamos subsistir. Muchos jugadores internacionales con España son de Jaca».
El fútbol femenino también tuvo representación de la mano de Rubén Alcaine. El Zaragoza CCF «ha tenido que hacer malabares para salir adelante. Afortunadamente La Liga ha apoyado el balompié femenino. La situación del deporte aragonés no mejora», añadió Rubén Alcaine. La cantera también es un aspecto mimado por el Ríos Renovables Zaragoza. Su presidente, José Ramón Moreno, comentó que «para poder ser un club referente en el fútbol sala hay que conseguir ingresos externos para poder subsistir».
El Bada Huesca compite en la Liga Asobal, la élite del balonmano español. Para Pachi Giné «el objetivo no puede ser otro que la supervivencia. Sin los patrocinadores no podríamos seguir». Otro club que alcanzó lo más alto fue el Club Voleibol Teruel, que ha paseado el nombre de la ciudad aragonesa por España y Europa. Aunque este año será diferente. «Hemos tenido que renunciar a la plaza europea que nos correspondía. Hemos priorizado mantener la estructura de base que participar a nivel internacional», aseveró Carlos Ranera, presidente del equipo turolense.
Uno de los clubs bandera en cuanto a formación deportiva se refiere es el Stadium Casablanca. Su presidente, Javier Sierra, explicó que «el Stadium ha llegado al deporte de élite gracias a las categorías inferiores. Gracias a los apoyos de los inversores podemos continuar con nuestros proyectos, aunque se echa en falta una mayor responsabilidad social de las empresas». Rafael Merino, directivo del CD Ebro, expuso el crecimiento del club bajo la identidad de equipo de barrio. «Sin consideración, ni apoyos, ni formación, ni trabajo podremos seguir creciendo», concluyó el dirigente arlequinado.
