Muchos no han practicado deporte en su vida. Pero la carrera a pie ha supuesto para ellos un fulminante flechazo. Practican deporte salud, se sociabilizan, sufren de vez en cuando en las competiciones, pero se divierten en su superación personal. Con la explosión de las carreras populares se creó la necesidad de entrenar a todas las personas que son neófitas en los esfuerzos de largo aliento. Fue entonces cuando se crearon los grupos de entrenamiento.

En la última década han crecido como setas. Los tienen atletas como María José Pueyo, Isabel Macías, Toni Abadía o Eliseo Martín, entrenadores particulares, gimnasios o organizadores de carreras. Es el caso de Running Zaragoza, que cuenta con una Escuela del Corredor hace diez años. «Cuando la creamos no había nada. Ahora tenemos 200 personas en los grupos de entrenamiento. Tenemos en iniciación, progresión y para la competición. Los entrenamientos los confecciona Chema Artero y tenemos diez técnicos», dice David Constante.

Sergio del Barrero también impulsó su grupo de entrenamiento, que es específico para mujeres. Se preparan los 10K que se disputa el 28 de mayo. «Lo denominamos el Reto10K Zaragoza. Se preparan para tres meses y está dirigido a todas aquellas que no hacen deporte», explica Del Barrero. Afirma que a dos meses y medio de la cita, «contamos con 200 mujeres que empiezan de cero. Y tenemos otras 350 que ya estuvieron otros años. En total contamos con 550 que denominamos naranjitas, el color de la camiseta con la que correrán». Es tal el éxito de la iniciativa, que de los 5.400 que compitieron el año pasado en los 10K Bancaixa, 2.400 eran mujeres.

También destaca la explosión de Run&Fun. Guiado por Jorge Marín, se creó hace dos años y medio con 20 corredores. Ahora tienen un centenar de todas las edades. Quedan en el pabellón Siglo XXI y les distingue su camiseta de color verde oscuro.