El dopaje, por desgracia, ha vuelto a golpear al ciclismo. Y lo ha hecho de la mano de uno de los equipos de la denominada serie B que evidencia que, en algunos países, hay escuadras y sobre todo corredores que siguen sin tomarse en serio el rechazo a las sustancias prohibidas.Ha sido el caso del modesto conjunto del Bardiani, que ha acudido a la salida del Giro, que empieza este viernes en Cerdeña, con dos corredores, entre ellos su líder Stefano Pirazzi, que no superaron sendos controles por sorpresa en el mes de abril. Pirazzi y también Nicola Ruffoni, han dado positivo al presentar valores hormonales prohibidos, presumiblemente variantes de la hormona del crecimiento, según informa el diario italiano 'La Gazzetta dello Sport', organizador de la prueba.

Pirazzi, de 30 años, tuvo su mejor año en el Giro, en el 2013, cuando se adjudicó la clasificación de la montaña y ganó la etapa reina, mientras que Ruffoni, de 24 años, llegaba a la ronda italiana tras adjudicarse dos etapas en la Vuelta a Croacia, última carrera preparatoria antes de la carrera rosa.

CASTIGO DE LA UCI

Con los preparativos de la primera etapa, la UCI podría determinar la expulsión de todo el equipo Bardiani, formado exclusivamente por corredores italianos, si considera como muy grave la infracción, basándose en la normativa antidopaje de la federación Así sería si la UCI aplica una suspensión inmediata entre 15 y 45 días a toda la escuadra.