Olvídense del circo, de un concierto de la Filarmónica de Viena o de los Rolling Stones. El mayor espectáculo del mundo es ver jugar a Álex Dujshebaev. Nadie debería perdérselo. No solo mete goles --ayer diez, como si tal cosa--, es que tiene recursos para aburrir, no se le arruga nunca el brazo, mira al extremo y al pivote, corre la contra, es el primero en bajar el balance defensivo... Cuando mejore sus prestaciones defensivas será un jugador total. Mientras, el Balonmano Aragón, y sus aficionados, disfrutan de su juego, de sus goles, y se enganchan a él para sacar adelante partidos complicados o aburridos como el de ayer ante Guadalajara (34-31) y seguir soñando con la Copa Asobal, que aún es posible matemáticamente tras la derrota del Cuenca.

Dujshebaev, Álex, es espectáculo, magia, arte por momentos. Tiene potencia desde los nueve metros, una finta poderosa, también marca en apoyo, al contraataque, y falla muy pocos siete metros. Ayer, ninguno. No le pesa la responsabilidad, cada decisión que toma, por inverosímil que parezca, le sale con toda naturalidad. La exhibición de ayer incluyó diez goles. Y porque Álex no es egoísta. Si lo fuera, ante el Guadalajara podría haber marcado el doble. Pero repartió también un buen puñado de asistencias y buscó con insistencia a Javi García en el pivote. Explotar esa sociedad puede darle al equipo de Mariano Ortega intersantes réditos en la segunda vuelta del campeonato.

ASIER ANTONIO Entre gol y gol de Dujshebaev transcurrió un encuentro extraño y aburrido por momentos. Frío como el ambiente, el Balonmano Aragón no tardó en hacerse con el mando del encuentro ante un errático Guadalajara. Con Asier Antonio convertido en el capo de la defensa naranja y una buena actuación de Argüillas en su primer partido completo bajo palos, el BM Aragón logró sus primeras ventajas para desesperación de Mateo Garralda, que agotó dos tiempos muertos en 15 minutos.

Parecía que podía ser un partido fácil. La ventaja local alcanzó los ocho goles (16-8, min. 28) ante un Guadalajara que sobrevivía con los goles de la primera línea, Nenadic y Radulovic básicamente. Pero en esta Asobal nada es como era y el cuadro alcarreño estuvo siempre en partido. Un par de palos consecutivos, la oportunidad de correr y el Guadalajara cerró el primer acto con un 0-4 que dejaba de nuevo el marcador abierto (16-12).

LA CONFIANZA Un 3-0 de inicio volvió a abrir brecha en el marcador nada más regresar de los vestuarios, pero el Balonmano Aragón se relajó atrás y permitió que el encuentro se convirtiera en un intercambio de goles y el Guadalajara hiciera la goma en el marcador. El cansancio de algunas de sus piezas clave, como Demetrio, propició algunos errores en ataque que permitieron a los alcarreños acercarse hasta a dos tantos (30-28, min. 56). Pero el BM Aragón creyó en sí mismo, volvió a marcar Álex, apareció Cartón en el momento oportuno tras una tarde aciaga, como solo hacen los grandes, resolvió Vigo y acabó Javi García, que tiene imán en las manos y la portería siempre perfectamente geolocalizada. Y así sumó dos puntos más el Balonmano Aragón y así se despidió de sus aficionados en casa en este 2012.