César Láinez, aunque el jugador prefiera esquivar por el momento la gloria personal, se encuentra cada vez más cerca de entrar en la historia del Real Zaragoza. Después de sortear este pasado domingo la marca de imbatibilidad más cercana en el tiempo que poseía Juanmi desde la temporada 97-98, el portero zaragozano se encamina hacia el récord absoluto, que está en manos de Andoni Cedrún y Manolo Villanova en Primera División, mientras que en Segunda lo ostenta Pedro Lasheras desde la 55-56.

Los tres consiguieron mantenerse imbatidos durante cinco encuentros consecutivos. Láinez, por ahora, ha logrado que ningún rival le marque en los últimos cuatro choques y acumula ya 372 minutos con el portal inmaculado. El próximo encuentro del Real Zaragoza es en Badajoz, y si el guardameta continúa con esta racha, igualaría a sus antecesores en el puesto en número de partidos.

Del Calderón a San Mamés

Andoni Cedrún estableció la mejor marca zaragocista en Primera en la campaña 91-92. Osasuna, Valencia, Tenerife, Cádiz y Valladolid fueron incapaces de hacer que el portero vasco acudiera al fondo de la red en una sola ocasión. 450 minutos a los que hay que sumar los 27 del Vicente Calderón antes de iniciar la buena racha (Losada marcó en el 53 el 2-1 para el Atlético) y los 36 que aguantó en San Mamés antes de que Valverde la rompiera (1-0). 513 minutos en total, por muy poco por encima de los 490 de Manolo Villanova en las seis primeras jornadas del curso 72-73, a quien Del Pozo, del Betis, batió en el Benito Villamarín a punto de finalizar la primera parte. El actual entrenador del filial defendió a la perfección su portería contra Granada, Burgos, Deportivo, Valencia y Oviedo. En Sevilla no fue posible pese a empatar (1-1).

El reloj ´Duward´

En Segunda División, nadie puede presumir de estar más tiempo sin que le batan que Pedro Lasheras. Ocurrió en la campaña 55-56, durante cinco partidos (Sestao, Caudal, Felguera, Racing de Santander y Eibar). El madrileño, además, fue zamora de la categoría, distinción que entonces se reconocía como mérito global. Cada jugador del Real Zaragoza, que el final ascendió a Primera en la promoción, recibió un reloj Duward .

Cuatro goles en ocho partidos. César Láinez repareció en la quinta jornada y, desde entonces, el conjunto aragonés no conoce la derrota. Su meta es ascender, no que le impongan una medalla. Pese a todo, su influencia en que el Real Zargozaa sea segundo es un hecho. El pasado domingo volvió a ser decisivo frente al Terrasa. En apenas 60 segundos, el meta evitó que Keko amargara la tarde a La Romareda. Lo hizo como siempre, con su agilidad portentosa para adivinar la trayectoria de los disparos. Está mandón, seguro y tranquilo. Tiene pinta de hombre-récord.