Tiene claro Popovic que la referencia de este equipo en ataque es Borja Bastón, que Pedro es indiscutible por su nivel y que Jaime Romero también debe serlo por su calidad y desborde. Hasta ayer lo había sido en la banda, pero ante el Recreativo el serbio puso al extremo por detrás de Borja, en la posición que más quebraderos de cabeza le está dando.

A su llegada, Popovic descabalgó de ese puesto a un Willian indiscutible para Víctor por el fútbol directo que buscaba el técnico aragonés, que veía necesario prescindir de la elaboración y que apostaba por llevar el balón rápido al área rival. Ahí, con ese estilo, acompañar a Borja con Willian era obligado. Popovic, que relegó a un papel secundario al brasileño, anunció un nuevo libreto a su llegada, del que ha cumplido poco en la capacidad asociativa y con el balón, quizá porque este equipo por ahí no da más de sí.

El caso es que Eldin fue el primero en ocupar esa demarcación por detrás de Borja, pero su rendimiento, notable ante la Ponferradina, fue bajando y el baño que el Valladolid dio al Zaragoza en la medular en la primera media hora llevó a Popovic a cambiar sobre la marcha la medular, dando entrada a Basha para que Galarreta jugara en la mediapunta y Eldin se acostara en la banda. La lesión del bosnio antes del choque con Las Palmas hizo que esa apuesta por el trivote con Galarreta más adelantado se consolidara, sin éxito, en el duelo con los canarios.

Galarreta, que empezó ayer en el banquillo, la misma decisión que Víctor Muñoz tomó en Soria, ocupó ante Las Palmas y Leganés la mediapunta, dejando claro que no está para esa posición, que quiere hacer más cosas de las que debe en ese puesto y que al final no tiene el gol necesario para jugar ahí. Su sitio, con imprescindible aumento de nivel, está en la medular, en la sala de máquinas. Al menos, ante el Leganés dejó su primera y única asistencia del curso en el primer tanto de Borja.

Popovic dio ayer otra vuelta de tuerca con Jaime por detrás de Borja. El extremo, al que el técnico serbio está mimando y del que está muy pendiente, tiene desborde y conduce bien el balón, quizá en exceso para ese puesto, donde el pase rápido es clave. Con todo, tiene más gol que Galarreta --marcó ayer y lleva cinco--, pero su lesión y la recuperación de Eldin, al que se le espera para Pamplona, convierten esa plaza en un enigma por resolver.