La plantilla del Real Zaragoza se encuentra desde ayer en casa después de haber permanecido trabajando intensamente durante ocho días en la localidad de Boltaña. El Zaragoza se puso en marcha el 12 de julio en la Ciudad Deportiva y en la localidad altoaragonesa ha completado el trabajo más fuerte de la pretemporada. En este periodo no ha habido lesiones importantes y en el choque de ayer solo hubo dos ausencias por este motivo. Álex Barrera, uno de los refuerzos llegados este verano, se perdió el partido contra el Almudévar por unas molestias mientras que Carlos Nieto fue baja porque en el entrenamiento del lunes por la tarde se resintió de un esguince externoclavicular que sufrió la temporada pasada.

Hasta Boltaña se desplazaron inicialmente 26 jugadores, entre ellos varios futbolistas del Deportivo Aragón y el juvenil David Subías, y volvieron 27 por las entradas y salidas que se produjeron durante la concentración. Se fueron Pablo Alcolea, que ha sido cedido al Toledo (Segunda División B); Pape Diamanka, que al final llegó a un acuerdo para rescindir su contrato y ya trabaja en Almería, y Xiscu, lesionado. A este último le sustituyó su compañero del filial Sergio Buenacasa. Y también llegaron como nuevos refuerzos los centrales Marcelo Silva (Valladolid), Popa (Inter de Milán) y el portero Xabi Irureta (Eibar). También ha dejado el club, aunque no ha estado en Boltaña, Adán Pérez por rescisión de contrato. Falta por salir el portero Manu Herrera y concretarse las cesiones de los canteranos Óscar Whalley y Diego Suárez.

Luis Milla ha aprovechado la concentración de pretemporada para empezar a ensamblar un equipo que otro verano más tiene muchas caras nuevas. Hasta ahora se han incorporado a la plantilla del Real Zaragoza diez jugadores nuevos si se incluye en esa nómina al portero Álvaro Ratón, que ha subido del Deportivo Aragón. Y todavía debe llegar algún refuerzo más, principalmente un jugador de banda y un punta. Milla ha probado hasta ahora con un sistema 4-1-4-1 con Alberto Zapater en el pivote de la zona medular y Cani jugando con libertad de movimientos en la banda izquierda.

La plantilla zaragocista disfruta hoy y mañana de descanso y el viernes reanudará el trabajo con dos sesiones de entrenamiento en las instalaciones de la Ciudad Deportiva para preparar el primer partido fuerte de la pretemporada, que se disputará el sábado 30 de junio contra el Nástic de Tarragona, un rival de Segunda División, en campo del equipo catalán. Ese será el tercer encuentro preparatorio del conjunto aragonés en una pretemporada que aún tiene otros cuatro programados. La semana que viene el equipo de Luis Milla se enfrentará al CD Teruel en Pinilla el día 3 y al Deportivo Alavés el día 6. El día 9 el rival será el Ebro y el 13, el Eibar en el Ciudad de Zaragoza.