La selección española de balonmano ya está en octavos de final del mundial tras arrollar a la débil Angola por 42-22. Ribera aprovechó la superioridad del combinado español para dar entrada a jugadores menos habituales como Costoya y Ángel Fernández.

Un tempranero 10-2 de parcial puso muy de cara el partido para España y, hasta el final del choque, la renta no paró de crecer hasta los veinte tantos finales.

Como nota anecdótica, el portero Figueira fue expulsado tras llevarse por delante a Ángel Fernández en una contra y Muachissengue, el otro guardameta, tuvo que dejar su sitio a un jugador de campo con un peto por unas molestias físicas.