La selección española se alzó ayer con el Trofeo Ciudad de Badalona tras derrotar a Ucrania (71-63), en un partido competido en el que el perímetro del equipo de Juan Antonio Orenga no despejó las dudas mostradas en las últimas semanas, al completar un porcentaje del 24% desde la línea de tres puntos. En el penúltimo partido de preparación de la Copa del Mundo, la magnífica actuación de los jugadores interiores compensó los problemas exteriores del equipo español, en el que solo Juan Carlos Navarro, con quince puntos, y Sergio Rodríguez dieron la talla.

Empezaron los locales con la quinta marcha puesta gracias unos pletóricos hermanos Gasol. Pau y Marc acapararon el juego español y anotaron los doce primeros puntos para su equipo, que logró su primera máxima ventaja a primeras de cambio (12-4, min.6). Con la ausencia de Rudy (no se vistió de corto por unas molestias en la pierna derecha), optó Orenga por dar entrada a Claver y Navarro como exteriores.

Sin embargo, el perímetro español se mostró igual de errático que en la semifinal ante Croacia al completar un pobre porcentaje desde la línea de 6,75 (1 acierto de 11 intentos en la primera mitad). Tras el ímpetu inicial de su rival, los ucranianos, entrenados por Mike Fratello, entraron poco a poco al partido (19-14). Destacaron Zaytsev y Natyazhko, máximo anotador con 17 puntos y 26 de valoración. Tras la reanudación, España abrió pequeñas ventajas que le llevaron al triunfo final. Pero con dudas.