Eran las nueve de la mañana cuando se dio el pistoletazo de salida a la trail de la Carrera del Ebro. Fueron 645 los valientes que afrontaron 30 kilómetros por los desiertos próximos de la capital aragonesa. Fue una mañana espectacular para correr. Frío, un sol impresionante y una ligera brisa. El gran enemigo del viento que todos temían y que con tanta fuerza sopló durante toda la semana apenas apareció.

La prueba volvió a ser un gran éxito y superó su récord con 3.005 corredores en liza. Fue el gran festival del deporte popular. La Carrera del Ebro se ha convertido en la gran referencia en Zaragoza. Es la prueba que todos tienen marcada con una cruz en su calendario. Es una magnífica preparación para las pruebas de ruta que se disputarán en la primavera, los 10K de Zaragoza, el medio maratón y el maratón de Zaragoza. La línea de salida en las instalaciones del Estadio Corona de Aragón es una pasarela de material de alta gama. Pese a no ser profesionales, los corredores o, lo que ahora muchos denominan como runners, van equipados con gorras, manguitos, gafas, tatuajes, medias, pulsómetros, camisetas técnicas... Se preparan metódicamente en grupos de entrenamiento en los que hay muy buen rollo.

Es el nuevo mundo del atleta popular, que nada tiene que ver con los profesionales que compitieron el mismo día en el Nacional por clubs de cross en Gijón y que tienen tan poco reconocimiento y eco mediático.

La climatología acompañó a los participantes. Y también la magnífica organización de la Brigada Aragón I del Ejército de Tierra y Unesco Aragón Deporte, que tratan de forma inmejorable a los participantes. Y la guinda es el bonito circuito que transita por la estepa del campo de maniobras de San Gregoiro, el Escarpe y finaliza en sus últimos kilómetros por las márgenes del Ebro. Es un recorrido rompepiernas sin un segundo de respiro y con unas vistas espectaculares. Y el ejército adornó el trayecto con material militar.

LOS RESULTADOS

Los primeros en llegar a meta fueron los aventureros de la trail. Se impuso un clásico de las carreras de largo aliento. Venció José Antonio Muro con un crono de 1.55.53. Tras él llegó a la meta Carmelo Lucea, con 1.57.04, siendo tercero Cristian Santiago, con 1.57.25. En mujeres se impuso Laura Peña, con 2.20.38, seguida de Paula Figols, con 2.23.36 y Cristina Puértolas, con 2.26.36.

Cinco minutos después de darse el pistoletazo de salida a los corredores de la trail llegó la hora de los andarines. Fueron 400 los que fueron tranquilamente a su ritmo equipados con su mochila. Y a las diez y media de la mañana llegó la hora de la marea humana. Fue entonces cuando las pistas del CAD fueron testigos de la gran estampida de un pelotón multicolor. Fueron Jesús Arroyo, el director técnico y Sergio del Barrero, el animador, los que encendieron los ánimos de los ateridos corredores. En chicos ganó Achraf Sellak con 44.29 a Jaime Mora y Sergio Serrano. Las tres primeras mujeres fueron Ana María López, con 54.37, Shawna Troupe y Sonia Gil.