Filip Kraljevic es uno de los refuerzos del CAI Zaragoza para esta temporada. El pívot, de origen bosnio pero nacionalizado croata, tiene 26 años, mide 2,08 metros y llega al club aragonés para reforzar la pintura de la plantilla de Casadevall. Su carrera comenzó en 2007, en Zagreb, y, desde entonces, no ha jugado fuera de las fronteras croatas. Hasta ahora.

--Esta va a ser su primera expedición lejos de su país, ¿está satisfecho con esa decisión?

--Por supuesto, estoy muy contento de estar aquí. El CAI Zaragoza es un gran equipo para mí y la Liga española es una de las mejores de Europa.

--¿Seguía la Liga Endesa en Croacia antes de venir?

--Claro. Si eres un jugador de baloncesto, estás obligado a seguir una Liga como la española. Veía los partidos por televisión y, cuando no podía, a través de Internet.

--¿Encuentra muchas diferencias entre la Liga española y la competición croata?

--En Croacia los partidos son más físicos, porque los jugadores son mucho más fuertes y entonces el baloncesto se vuelve más lento. Aquí, en España, los jugadores son más técnicos y los equipos tienen bases que son muy rápidos. Pero no creo que eso vaya a ser un problema para mí.

--Ha jugado toda su vida en Croacia, ¿va a echar de menos competir en su país?

--Bueno... Puede que un poquito. Lo cierto es que estaba buscando una oportunidad como esta. El baloncesto es mi vida y tenía que marcharme lejos si quería competir a otro nivel, y en España se juega a un nivel distinto al de la Liga croata. Reconozco que echaré de menos a mis amigos, pero, oye, esta es mi vida.

--¿Conocía al CAI Zaragoza?

--Sí. Seguía la Liga Endesa en mi país y conocía al equipo; especialmente gracias a mi amigo Damjan Rudez, que estuvo jugando en el CAI Zaragoza durante dos temporadas.

--¿Habló con Rudez sobre su posible traspaso?

--Sí, hablamos mucho tres días antes de venir aquí. Me dijo muchísimas cosas buenas sobre la ciudad, la cercanía de la afición y el club. Y la verdad es que estoy realmente agradecido de poder estar aquí. Por el momento, la organización del equipo es buena y todo lo que puedo decir sobre el club es que es perfecto.

--¿Esas fueron sus motivaciones para venir aquí?

--Recibí otras ofertas de la Liga española y, cuando hablé con Rudez, me dijo que aquí iba a ser muy feliz. Y no me lo pensé ni un segundo.

--¿Qué le parecen sus nuevos compañeros y entrenador?

--Todo es genial por ahora. Mis compañeros son muy positivos y son buenas personas, muy divertidas; y el entrenador es exactamente igual. Nos pide que demos lo mejor en los entrenamientos cada día, pero también sabe entender que los comienzos de temporada son duros.

--¿Cómo es Filip Kraljevic dentro de la pista?

--En la cancha... No puedo decir mucho sobre mí. Soy un buen defensor y taponador, hago transiciones rápidas y tengo un buen lanzamiento desde la pintura, de cerca. No soy tan distinto a los pívots de la Liga Endesa.

--¿Y fuera de ella?

--Lejos del pabellón soy un tipo normal. Una persona divertida y cercana, no tenga nada especial.

--¿Se ha marcado algún objetivo personal esta temporada?

--Cuando juego a baloncesto no pienso en objetivos personales, sino más bien en dar lo mejor de mí cada partido. Algunas veces puedes marcar 30 puntos y, otras, solo puedes meter 2. Pero si das lo mejor de ti nunca puedes quedarte insatisfecho. Lo importante es el equipo: si puedo no meter ningún punto en un encuentro, pero ganamos el partido, seré feliz.

--¿Y el equipo, se ha marcado ya algún objetivo?

--Creo que tenemos que ir paso a paso. Puede que sea complicado fijarse un objetivo sin empezar la temporada. Necesitamos pelear desde la primera jornada, ir partido a partido y, luego, ya veremos qué sucede.