Solo la guerra daba sentido a su vida. Siempre fieros, determinados en el combate, sedientos de venganza y muy crueles con el enemigo. Eran invencibles. Eran los almogávares. Surgidos del pueblo, surgidos de los Pirineos, fueron los guerrilleros que sirvieron a la expansión máxima de la Corona de Aragón. El equipo de trabajo que ha dirigido Amadeo Sorli tras la desaparición del Balonmano Aragón hace pocas semanas no lo dudó un instante. La continuidad de la cantera que cuenta con 16 equipos y casi 200 jugadores no se quedará colgada el año que viene. El nuevo equipo se denominará Almogávares.
Esta temporada y casi por sorpresa por parte de los dirigentes del equipo zaragozano se cerraba un ciclo que comenzó en el año 2000 con el ascenso a la Liga Asobal del Balonmano Aragón y cuyo hito más importante fue la final de la Copa EHF frente al Magdeburgo en el año 2007. Después la mala gestión de sus dirigentes llevó al equipo al hoyo. Ahora comienza una nueva etapa basada en el trabajo de la cantera. Pensar en regresar a la Liga Asobal es simplemente utópico. El guía de esta larga andadura será Sorli, el gran capitán del Balonmano Aragón.
Sorli ha vivido momentos muy críticos en los últimos años. "Lo que le ha pasado al primer equipo le ha afectado al resto para que no estuvieran lo bien que deberían estar. A los pequeños que iban a ver al equipo de Asobal se les hace extraño que desaparezca el club y se preguntan porqué. Acaba un ciclo y, después de buscar varias opciones, la mejor es intentar crear un proyecto nuevo y darle continuidad al trabajo que durante años se ha hecho bien sacando muchísimos chicos", explica.
El equipo que coordina Sorli se reunió y no dudó a la hora de bautizar al nuevo club. "Lo que nos cautivó de la historia es que los Almogávares eran tropas luchadoras. Ese valor no hay que perderlo y tenemos que ser un referente del balonmano. Cambiamos de nombre, pero seguimos siendo los mismos de siempre. La idea es buena, ilusionante y buscamos apoyo para la gente que quiera aportar", explica.
Nuevas opciones
Se estudió a posibilidad de trasladar toda la cantera a otro colegio o a otro club. "Pero somos una masa muy grande, hay problemas de pabellones y pretendíamos buscar lo mejor para los chicos. En cualquier club estarían encantados con que estuvieran, pero optamos por que siguiera el mismo bloque".
Han pasado semanas desde que se hizo oficial la desaparición del BM Aragón y Sorli todavía no se explica esta situación surrealista. "La cosa estaba complicada y no sabíamos lo que iba a pasar al final de la temporada. La incertidumbre ha sido la misma los últimos años. La desaparición fue de la noche a la mañana y no nos creíamos el porqué de esta situación. Nos lo comentaron horas antes sin opción a tomar otras decisiones. Los jugadores nos preguntamos por qué no se tomó al final de la temporada. Se podría haber mandado un SOS para buscar ayudas y poder acabar la temporada. Pero la pelota se estaba haciendo muy grande", explica Sorli.
La filosofía de trabajo es clara de cara al año que viene. "La idea que llevamos es que los equipos de rendimiento sean los federados y desde cadete para abajo formar a jugadores y que los chavales vayan aprendiendo, se diviertan y vayan mejorando", indica. Sorli está a punto de cumplir 40 años y ha jugado once en la Liga Asobal. Comenzó a llevar a equipos de alevines en Cristo Rey. "Pero no le pude dar el tiempo que me habría gustado. También llevé selecciones territoriales en cadete y juvenil. Es complicado saber que es lo que más me gusta, si entrenar, ser coordinador o jugar. Ahora lo que más se agradece es el tiempo que puedo pasar con la familia y entrenar me lo quita", reconoce el extremo aragonés.
