El Madrid se prepara para nuevos tiempos. Después de dos años sin levantar un trofeo y tras la llegada de Florentino Pérez para impulsar un proyecto que no ha dado frutos tras un desembolso de 260 millones de euros, comienza la era Mourinho, la escenificación de un hechicero dispuesto a cambiar la imagen perdedora de un equipo al que pretende dar su sello nada más aterrizar. Hoy a las 13.00 horas será presentado por la persona que ha apostado por él, Florentino, para iniciar una nueva era.

La capacidad camaleónica de Mourinho le permite adaptarse a cualquier equipo por muy complejo que sea éste. Lo hizo en Portugal, con el Oporto, con el Chelsea o con el Inter. En ese recorrido ha sabido sacar lo mejor de cada jugador hasta conseguir las metas más ansiadas. Algo similar quiere hacer en el Madrid, donde tendrá el mando para tomar todas las decisiones. Eso es algo que no se discute. Desde Jorge Valdano, director general, hasta el último utillero se pondrán a las órdenes de Mou. Todo lo que no ha tenido Pellegrini lo tendrá su sustituto en el banquillo.

Con Mourinho no se darán casos como el de la pasada temporada, cuando Pellegrini quiso quedarse con Robben y Sneijder y el club decidió venderlos. La autoridad de Mourinho abarcará todas las facetas. "Tiene un liderazgo muy fuerte y su llegada nos permitirá dar un impulso al proyecto", decía Valdano. Por supuesto que lo de las altas y las bajas correrá de su cuenta. Ahora mismo, Mourinho ya tiene prácticamente en su cabeza el dibujo del Real Madrid que quiere.