Los jugadores del Real Zaragoza que se desplazaron a Cádiz realizaron ayer por la mañana una breve sesión de trabajo en el estadio de La Romareda nada más llegar del viaje de tierras gaditanas. La expedición zaragocista pernoctó en Sevilla, hasta donde se desplazó en autocar tras disputarse el partido del Ramón de Carranza, y ayer completó el regreso a la capital aragonesa en el AVE. Desde el inicio de la sesión preparatoria se pudieron observar caras serias y pocas ganas de hablar. La goleada encajada (3-0) en terreno gaditano (la más abultada desde el inicio de este curso recibida por el cuadro aragonés) principalmente y el cansancio acumulado por el largo viaje, en menor medida, invitaban a pocas alegrías durante el trabajo del equipo.
El primero en pisar el césped fue el entrenador Raúl Agné, con rostro muy serio. En la rueda de prensa posterior al encuentro ya mostró su profundo malestar por la actuación del equipo en el Carranza. Allí espero la llegada de los jugadores y de otros componentes del cuerpo técnico. Agné no hizo ningún comentario sobre el césped. Todo el peso de la sesión corrió a cargo de Toni Masferrer, preparador físico del equipo. Su voz fue la única que se pudo escuchar durante todo el entrenamiento (por lo menos en el cuarto de hora que se realiza a puerta abierta para la prensa). En el estadio de La Romareda hubo un silencio casi sepulcral durante la mayor parte de la sesión. Se notaba que el 3-0 encajado en el estadio Ramón de Carranza, donde el Zaragoza dio una imagen muy pobre, seguía pesando en la mente de todos y todavía continuaba escociendo.
En ese ambiente de funeral se desarrolló todo el entrenamiento en La Romareda. En el plano meramente dedicado al trabajo, los jugadores que fueron titulares en campo del Cádiz se dedicaron a hacer carrera continúa, mientras que el resto estuvieron corriendo con mayor intensidad. Solo José Enrique, con síntomas de cansCancio, no compareció sobre el césped y realizó un trabajo individualizado en el gimnasio. El lateral izquierdo no debería tener en principio problemas para estar a disposición de Raúl Agné para la visita del Oviedo.
Descanso y reflexión
La plantilla del Real Zaragoza disfrutará hoy de descanso y mañana empezará a preparar ya el encuentro contra el Oviedo, que se disputará el domingo, a partir de las 20.00 horas, en el estadio de La Romareda. La jornada de hoy debería servir a la plantilla para descansar y reflexionar sobre la pobre imagen ofrecida por el equipo en el Ramón de Carranza. El Zaragoza acumula ahora tres jornadas de Liga sin ganar y debe conseguir la victoria ante el cuadro ovetense para no verse metido en problemas en la clasificación. Después, en el último compromiso liguero del 2016, el conjunto zaragocista rendirá visita al Rayo Vallecano, que ha empezado a sacar el cuello de la parte de abajo de la tabla.
