El Real Zaragoza se ganó el derecho a depender de sí mismo en la última jornada de la Liga Adelante tras su sufrida victoria sobre el Real Oviedo, un rival directo en dicha lucha y que con la derrota se queda sin opciones de jugar siquiera la promoción.

El enfrentamiento, una auténtica final para ambos, se lo llevó el conjunto maño, que tuvo oportunidades para haber cerrado la contienda porque pudo marcar el segundo, pero también el equipo del Principado gozó de opciones para haber empatado.

El Real Zaragoza comenzó como un flan el encuentro, regalando varios balones en las cercanías del área y dando una gran sensación de inseguridad.

Sin embargo, el conjunto asturiano no supo aprovechar los nervios iniciales de los propietarios del terreno, especialmente con un remate de Viti fuera, y poco a poco vio como el conjunto de Lluis Carreras se serenó algo más y, sobre todo de medio campo hacia arriba, en donde tras unos inicios con balones largos que facilitaban la labor de los defensores se decidió a jugar más por raso y apoyándose.

La primera ocasión de peligro llegó en una contra del Real Zaragoza en el minuto 8 que culminó Ángel con un remate al poste.

Diez minutos después, Diamanka realizó una jugada personal en el área pero su disparo salió alto y fue el preludio del gol de un equipo zaragozano que se soltaba cada vez más en ataque.

Dos minutos después de la acción del jugador nigeriano, un centro desde el lado izquierdo del ataque maño fue rematado por Ángel a bocajarro sacando milagrosamente el meta Rubén Miño el balón, pero el rechace fue aprovechado por el central Guitián para marcar el único tanto de la tarde, un gol con suspense porque también sacó el cancerbero foráneo el balón pero éste ya había entrado en la portería completamente.

A partir de ahí, el Real Zaragoza, a diferencia de lo ocurrido el pasado jueves en Huesca, siguió dominando el juego y buscando el segundo ante un Real Oviedo que intentaba estirarse pero que no llegaba con ningún peligro al área local.

Sin embargo, las cosas cambiaron de decoración al regreso de vestuarios porque con la entrada de Susaeta y Linares en el equipo de David Generelo, el conjunto carbayón comenzó a dominar y, por lo ajustado del marcador, a dar sensación de peligro.

Un gol anulado a Koné por fuera de juego en el minuto 56 era el aviso de que el equipo del Principado tenía capacidad para igualar la contienda, aunque un minuto antes el lateral local Isaac pudo haber puesto el tanto de la tranquilidad en un remate al lateral de la red.

Entre el empuje del Oviedo, al que como al conjunto local solo le valía la victoria para seguir dependiendo de sí mismo, y el miedo del Zaragoza, éste reculó y los visitantes comenzaron a tener sus primeras opciones del partido.

Un centro envenenado de Jon Erice que se colaba por la escuadra fue despejado con muchos apuros a córner por Manu Herrera en el minuto 55 y en el 70 Linares gozó de una ocasión tras un mal pase atrás del zaragocista Pedro.

Entre ambas oportunidades a los propietarios del terreno les fue anulado un gol por fuera de juego.

Los nervios volvían a hacer acto de aparición pero en esta caso no solo para los locales sino para todos porque el meta Rubén Miño calculó mal en una salida en un saque de esquina y permitió a Cabrera enviar el esférico al larguero.

Las oportunidades merodeaban ambas áreas y todo era cuestión de que alguien fuera capaz de precisar lo suficiente como para acertar.

En un final frenético y de infarto, cualquiera de los dos pudo haber marcado, pero éste no varió y el Real Zaragoza se jugará sus opciones de Promoción en el campo del Llagostera, que hoy ha perdido la categoría.

- Ficha técnica:

1 - Real Zaragoza: Manu Herrera; Isaac, Guitián, Cabrera, Rico; Diamanka, Erik Morán, Dorca; Lanzarote (Rubén, min.82), Ángel (Dongou, min.73) e Hinestroza (Pedro, min.63).

0 - Real Oviedo: Rubén Miño; Nacho López, Josete, Verdés (Cervero, min.71), Dani Bautista; Jon Erice; Viti (Susaeta, min.54), Michel, Edu Bedia (Linares, min.58), Hervías; y Koné.

Gol: 1-0. min.20. Guitián.

Árbitro: Ocón Arráiz, del Comité Riojano. Amonestó con tarjeta amarilla a los locales Ángel y Manu Herrera y a los visitantes Rubén Miño, Jon Erice, Michel y Nacho López.

Incidencias: partido correspondiente a la jornada 41 de la Liga Adelante disputado en el estadio de La Romareda ante unos 24.000 espectadores.