Visita el Real Zaragoza el Estadi Municipal de Reus (21.00 horas. Gol) con la idea de dar otro paso hacia el playoff de ascenso a Primera, al que regresó la jornada pasada tras ganar al Almería. Abren la jornada, la número 37 de 42 (ya solo quedan seis en esta eterna Segunda), los zaragocistas, un dato que solo es positivo si se da la victoria en el feudo catalán, aún más teniendo en cuenta los duelos directos por subir a la élite que se disputan este fin de semana. Otra cosa es que sea sencillo ganar en el hogar que fue de Natxo González, en dos etapas distintas, y ante el equipo que ahora comanda Aritz López Garai, con tanto o hasta con más acierto que su predecesor. Vencer en Reus, donde nadie marca un gol desde el 13 de enero y solo han ganado dos equipos en toda la Liga, es un reto enorme para este Zaragoza lanzado en la segunda vuelta.

A siete puntos de la segunda plaza (Sporting) y a nueve del liderato (Rayo) cuando quedan 18 por jugarse, el propio Natxo descartó ayer la opción del ascenso directo. El debate sería si tuvo que ser tan tajante o no, pero es obvio que esa meta está casi perdida y que el objetivo real o al menos realista es atar el playoff en la posición más alta posible. Y eso exige sumar cuantos más puntos mejor, teniendo en cuenta que el calendario ahora se empina. Hay que jugar contra el Reus hoy, recibir al Sporting y acudir al feudo del Cádiz, enemigo directo por una promoción que las cuentas hablan de que va a exigir al Zaragoza al menos nueve puntos más. Eso, como mínimo.

NATXO, EN LA GRADA / El Zaragoza, si supera la dura prueba de Reus con victoria y confirma su excepcional segunda vuelta (34 puntos de 45), dormirá esta noche con 61 y como cuarto, a esperar a ver qué hacen sus rivales. La jornada tiene dos duelos directos por el playoff (Valladolid-Cádiz mañana y Numancia-Oviedo el domingo) y otros dos entre candidatos a subir directos y a hacerlo por la promoción (Huesca-Granada mañana y Rayo-Tenerife el domingo).

Con lo cerrada que está la batalla en la lucha por esos billetes de playoffs, con ocho equipos en seis puntos, lograr el botín en Reus sería para el Zaragoza oro puro, un tesoro incalculable. La cita es especial para Natxo González, sancionado por amonestaciones en su retorno a la que fue su casa, el club en el que en dos etapas consiguió hacer historia, sobre todo en la segunda de ellas, cuando logró el ascenso a Segunda por primera vez y la holgada permanencia en la categoría de plata el curso pasado. No podrá estar en el banquillo y sí en la grada en su retorno. Sobre el césped estará su segundo, Bernardo Tapia, otro que también regresa a Reus.

Pero el fútbol no entiende de sentimentalismos y Natxo sabe que por ganar al Reus, por superar a su exequipo, pasan muchas opciones de playoffs. El sentimiento para el técnico se quedará en los saludos y en el esperado buen recibimiento de la grada. Después, cada uno a lo suyo, que para el Zaragoza es ganar o ganar.

La idea del preparador vitoriano es dar continuidad al once que derrotó al Almería, aunque Javi Ros, suplente ese día, apunta a ser la única novedad, con más números de quedarse en el banquillo para Zapater, del que el propio entrenador ya avisó hace algunas semanas que entraría en las rotaciones, que para Guti, que ya descansó ante el Huesca. El resto serían los mismos, con Papu como bastión seguro de nuevo en la mediapunta, donde tan buen partido cuajó contra el conjunto almeriense. No es probable, sin embargo, el relevo de Pombo, de nivel decreciente últimamente. El canterano se mantendría como pareja de Borja.

López Garai ha seguido en el Reus la línea marcada por Natxo. Era su mariscal de campo en las dos últimas temporadas y, tras colgar las botas, el nuevo técnico tiene un ideario similar en el concepto de bloque y en el sistema defensivo, aunque es verdad que su Reus apuesta algo más por la pelota que lo que lo hacía el del ahora preparador zaragocista.

SALVACIÓN CASI SELLADA / El Reus es el rey del empate, junto a Osasuna, con hasta 14 tablas, y solo Rayo y Lugo han asaltado su estadio. Con 47 puntos y ocho de renta sobre el descenso tiene la permanencia casi sellada, a falta de un visado que aspira a lograr con un triunfo ante un Zaragoza, al que por cierto, no se le da bien el conjunto catalán, al que no ha vencido aún en Segunda. Otra razón más para pensar que ganar hoy es un gran reto.