La Sociedad Deportiva Huesca necesita la victoria (12.00 horas) para dar un salto en la clasificación, y alejarse de la zona de descenso de la que solo se encuentra a un punto, ante un Valladolid muy lanzado, que busca el triunfo para seguir en lo más alto y a ser posible colocarse como líder en solitario. Así, el enemigo en el partido 300 del Huesca en Segunda no puede ser más complicado.

Además, un triunfo permitiría al conjunto altoaragonés coger más confianza, ya que no ha tenido un buen comienzo de campaña, tanto en la Liga como en Copa, en la que fue apeado por el conjunto vallisoletano.

Lo que más preocupa en el equipo oscense son los despistes a nivel defensivo tras los saques de esquina o faltas, que le están costando puntos debido a los errores que cometen los jugadores azulgranas, ya que en el juego y en la creación de ocasiones de gol están rindiendo a buen nivel.

El técnico del Huesca, Joan Francesc Ferer, Rubi, ha incidido en esta semana en varios aspectos, sobre todo en el balón parado, y ya anteriormente lo hizo con las amonestaciones logrando en las dos últimas jornadas cortar las numerosas tarjetas que recibían sus jugadores.

El entrenador del conjunto aragonés no ha dado pistas sobre el posible once titular que opondrá al bloque pucelano, pero es probable que se produzcan un par de cambios en el mismo. En cada jornada Rubi introduce alguna novedad aunque el resto son fijos para jugar todas las citas.

En portería y defensa no se prevén cambios. La duda es si el Huesca jugará con doble o triple pivote, ya que va alternando el técnico según los partidos. En el primer caso, serían Aguilera y Melero los que lo ocuparan y en el segundo podrían entrar tanto Sastre como Luso Delgado. También es posible que en la mediapunta haya alguna novedad.

EL RIVAL / El Valladolid cuenta con una sola baja por lesión, la de la última incorporación del equipo, el griego Gianniotas, quien acabó la sesión de ayer con una sobrecarga que le apartó de la lista, donde tampoco están por decisión técnica Moyano, Ángel, Calero, Sulayman y Cotán,