El técnico, sancionado por dos partidos por su expulsión ante el Barça, estuvo siguiendo el encuentro desde un palco vip del estadio Sánchez Pizjuán. Jiménez permaneció en todo momento en contacto con el banquillo a través de un pinganillo y del móvil. Por otra parte, en representación del club, viajaron Agapito Iglesias, Paco Checa, Antonio Prieto y Carlos Cuartero.