Dice que le gusta un baloncesto alegre, atractivo, basado en defender y correr, pero con la plantilla todavía en pañales Jota Cuspinera solo puede prometer por ahora ilusión y trabajo, mucho trabajo, «la única forma que conozco de sacar los proyectos adelante». Llega al banquillo del Tecnyconta Zaragoza para liderar un proyecto a medio y largo plazo, tan convencido de que ha elegido el sitio adecuado como lo está el club de haber encontrado al técnico con el que recuperar la estabilidad en el banquillo.

Cuspinera no quiso hablar de las «razones personales» que le llevaron a abandonar el Fuenlabrada pero sí explicó por qué se decidió tan rápido por el Tecnyconta aunque recibió el interés de otros equipos como el Tenerife. «Sentí que había interés en Jota y eso me llamó mucho la atención. Zaragoza es una ciudad de baloncesto y, si a eso le sumas ese interés en mí, la sensación de feeling fue inmediata y no me plantee nada más. Me gustan los proyectos donde me siento a gusto y feliz», indicó el entrenador.

El objetivo de partida es que el Tecnyconta no vuelva a vivir una temporada como la pasada. «Nadie estamos libre de ninguna situación, pero el proyecto es ilusionante. La intención es no sufrir y alcanzar a medio plazo los puestos más altos posibles», apuntó Cuspinera, que quiere una plantilla mezcla de veteranos y de jóvenes («jugadores que aporten el valor de la experiencia mezclado con jovenes que sean presente y tengan un futuro prometedor») y que tiene muy claro el valor de la cantera. «Hay grandes proyectos. Hay que cuidarlos, mimarlos pero sin ponerles la alfombra roja. Se me ha pedido que lo tenga en cuenta y eso también es atrayente. A medio plazo hay 4 o 5 jugadores que deben estar en el primer equipo», anunció.

Habló también de nombres propios. De los jugadores con contrato y de posibles renovaciones. Cuspinera cuenta con Bellas y García. «Creo que el base está muy bien cubierto. Me gustan los dos. Me gustaría también tener un escolta, o un exterior, que pudiera jugar de base por si hiciera falta en momentos de emergencia». En cuanto a la posible renovación de Henk Norel, el técnico indicó que hay «múltiples aspectos» y recordó que una negociación «depende de dos partes». Salva Guardia añadió que el club está «ajustando el presupuesto». La renovación del holandés pasaría por una rebaja sustancial de su ficha. Sobre Marcos Knight solo apuntaron que lo están «valorando», puesto que tienen hasta el 15 de julio para ejercer la opsción preferente sobre él. Guardia explicó también que en los próximos días puede haber más novedades en el cuerpo técnico. El club quiere que Sergio Lamúa se incorpore como ayudante de Cuspinera.

UNA CATARSIS / Jota también expuso su ideario, aunque no como una ley rígida sino como un punto de partida maleable que dependerá de los jugadores que tenga. «Me gusta un baloncesto alegre, atractivo para jugadores y aficionados. Para competir, además, hay que defender, bajar al barro, hacer un trabajo sucio que cuesta pero es imprescindible. Lo ideal es defender y correr», enumeró. Sin embargo, también recalcó la importancia de los jugadores, de saber explotar sus características. «Creo mucho en destacar las virtudes del jugador. Cuando tengamos toda la plantilla veremos si hay que jugar de una forma u otra».

Cuspinera no se mostró partidario de hacer muchos cambios, aunque de vez en cuando son necesarios. «Si todos los años cambias diez jugadores, no hay proyecto. Si de vez en cuando hay una catarsis es bueno. Pero los equipos se construyen con tiempo, que no es de lo que más disponemos», argumentó.