El Mann Filter se encuentra en una situación inmejorable. Ocho partidos imbatido, tercero de la Liga, dio una gran nota en la Copa de la Reina. El primer equipo de la Liga Femenina Dia se apoya en una gran cantera de 34 equipos y más de 300 deportistas. «Estoy con el equipo en una situación excepcional y con un equilibrio agradable. El proyecto se está llevando de una manera impecable», dice Víctor Lapeña, el técnico del Filter.

El aragonés, que se formó como técnico y entrenador en el Stadium, regresó al rescate del equipo en diciembre del 2015 en sustitución de Jesús Gutiérrez. «Javier Sierra, el presidente, y los directivos del Mann Filter me convencieron para que les echara una mano. Conseguida la permanencia, valoramos hacer un proyecto de tres años en base al trabajo con la cantera», explica.

En noviembre Lapeña habló con el presidente para renovar su contrato. «La idea era seguir en la misma línea con mi equipo de trabajo». Pero las conversaciones están paralizadas a tres meses de que finalice el contrato de Lapeña, que se ha encontrado con el silencio de la cúpula del Stadium. «Han entrado a dirigir otras personas el club. El nuevo presidente de la Agrupación es Julián Tapia y mi renovación se ha paralizado. No se cuáles son las intenciones de la nuevas personas. Ahora me centraré en acabar esta temporada y dejar al Filter lo más arriba posible».

El técnico zaragozano cuenta en su equipo de trabajo con gente de confianza como Santi Pérez, su segundo, Isaac Caseras, el preparador físico, y el fisio Juan Carlos Palacio. «Todo estaba enfocado en la formación de jugadoras para poner nuestro estilo y nuestro método. Lo conseguimos gracias al apoyo de Javier Sierra, Freddy Gimeno, el delegado y Armando Loren, el anterior presidente de la Agrupación», dice.

El futuro lo ve entre interrogantes. «Mi sensación es que terminaré el contrato, daré gracias al club por confiar en mí y buscaré otro proyecto. Las jugadoras son caso aparte. Estoy muy contento del trabajo que todas ellas están haciendo. Pero ya veremos porque el futuro es incierto, no veo fácil seguir». No cree que tenga que ver nada el tema económico. «Los directivos valorarán el presupuesto, tomarán las decisiones y dirigirán la estructura de otra manera. Pero yo he cobrado puntual y para esto el Stadium es muy serio», cierra.