Monse Abelló completó una década y media de gloria para el atletismo aragonés. Simpática, dicharachera y humilde, con un marcado acento baturro, fue todo en el fondo femenino nacional. Era una época en la que se enfrentó a grandes atletas como Carmen Valero, Pilar Fernández, Merche Calleja o Ana Isabel Alonso. Desde joven compatibilizó el atletismo con el trabajo en un taller de confección. Todos los días se entrenaba con constancia siguiendo los consejos de Eduardo Ruiz, Pedro Pablo Fernández y después Miguel Ángel de Arce.

Sus mejores triunfos los consiguió en una época en el que el mejor fondista masculino era un atleta de clase como Javier Cortés. Después llegaron Luisa Larraga y fue en el momento de su retirada cuando empezaba a despuntar Eliseo Martín. Nunca fue olímpica y su máximo orgullo fue disputar 14 Campeonatos del Mundo de cross con la selección española. Pero entre tantos grandes recuerdos, uno siempre se refleja en su memoria. «Fue la Milla Ibercaja de 1987. Se disputaba de noche en el Paseo de la Constitución. Fue toda mi familia a verme y logré un triunfo espectacular frente a Dolores Rizo y una atleta que llegaba en gran forma como Maite Zúñiga», recuerda 31 años después. En esa noche el ganador masculino fue el británico Peter Elliot por delante de Marc Rowland.

Abelló fue una de las imágenes más repetidas de las carreras populares en Zaragoza, que por aquellos años empezaban a estar en alza. La atleta aragonesa se llevó la primera edición de la Carrera del Ahorro que organizaba Ibercaja por delante de Susana Irazusta. Fue un 1 de octubre de 1983. En la categoría masculina el podio lo ocuparon Manuel Hernández, Javier Cortés y José Luis Mareca. «Es la primera carrera que dieron premios por ganar. El que tenía libreta en Ibercaja le doblaban la cantidad que ganaba. Era un premio muy importante, que sería de 75.000 pesetas», afirma la fondista zaragozana. Abelló recuerda que «la prueba era muy similar, de seis kilómetros como ahora».

La entidad financiera se ha querido acordar de Abelló y le hará un gran homenaje antes de que comience esta mañana la popular a las nueve y media. «Me ha hecho mucha ilusión que me llamaran. Me lo dijo Fernando Arcega y me comunicó que habían pensado en mí. Fui la primera mujer que gané esa carrera, la disputé muchos años y nunca me habían llamado», indica Abelló.

Era una atleta diesel, una corredora de gran ritmo de crucero, pero sin esprint. Ganó dos Nacionales de cross por clubs, pero su espina clavada fue el Nacional individual. A punto estuvo de ganarlo en Lérida en 1982. Pero la sobrepasó a 200 metros de meta Merche Calleja.

Tiene 63 años y sigue corriendo todos los días una hora en Villanueva de Gállego, el pueblo donde reside. «Pero voy a disfrutar y lo mismo me da hacer 12 que 13 kilómetros». Reconoce que ahora «primordialmente soy abuela. Cuando vienen Marcos y Clara nos dedicamos a los nietos. Son la vida», finaliza la exatleta.