El Real Madrid recuperó el tercer puesto con una victoria en La Rosaleda, como ocurrió la pasada temporada, cuando se proclamó campeón de Liga, en un partido en el que fue superior, con el malagueño Isco como protagonista, ante un Málaga ramplón, tímido y prácticamente descendido, que maquilló el resultado con un gol en el último segundo del delantero uruguayo Diego Rolan.

El Málaga encerrado en su campo daba muchas opciones al Real Madrid, que tocaba y trenzaba a su antojo y placer, aunque sin rematar. Veintiocho minutos duró el Málaga con la igualada a cero hasta que Isco, al que le hicieron falta en la frontal del área, lanzó y marcó, pidiendo perdón a los aficionados malaguistas que tanto le veneran. El Real Madrid jugando a medio gas dominaba a un Málaga temeroso, sin recursos y sin calidad. Isco volvió a ser el protagonista con un lanzamiento que rozó el poste.

El Málaga tardó 41 minutos en crear algo de peligro y fue en una falta lanzada por el defensa venezolano Roberto Rosales. A continuación, la entrega del guardameta costarricense Keylor Navas, al centrocampista brasileño Casemiro, fue defectuosa e Iturra le adivinó la intención, robó y su disparo lo abortó el portero con su pierna izquierda.

El encuentro se inició en la segunda parte de forma similar a la primera, con el Real Madrid dominando, con incursiones por las bandas, con Isco de canalizador, pero sin un finalizador. El partido despertó algo por parte del Málaga, incluso hubo un choque entre Keylor Navas y Vallejo, que dejó al central tendido en el césped, pero recuperado. El Madrid no sufría en exceso y sabía que en cualquier momento el segundo gol llegaría y por consiguiente la sentencia. Fue tras un robo de Casemiro, con pase de Benzema a Isco y este, viendo al brasileño que le acompañaba, fue generoso y le dejó el balón, que solo tuvo que empujar a la red. Rolan acortó distancias en el descuento con un balón en el área pequeña al que no llegó Vallejo.