Normalmente suele ser tras la jornada de descanso, pero esta vez fue un día más tarde cuando el cuerpo técnico del Real Zaragoza, con Lluís Carreras a la cabeza, hizo el repaso del vídeo del último partido disputado contra el Leganés con la plantilla. La sesión de ayer fue más larga de lo habitual, pero también había un motivo para ello. Antes del inicio de la misma, todos los jugadores recibieron una especie de manual de buenas prácticas de obligado cumplimiento escrito en un par de folios. Carreras hizo también una exposición de las mismas.

Por ese motivo acudieron a la sala de vídeo todos los componentes de la plantilla zaragocista, incluidos los lesionados (Jesús Vallejo, Jaime Romero, Wilk, Abraham, Isaac y Marc Bertrán). También estuvieron al principio de la sesión todas las personas que trabajan al lado de los jugadores, como fisioterapeutas y utilleros. En ese manual de buenas prácticas se hace constar que todos deben llegar a los entrenamientos con puntualidad, que deben vigilar el peso o los horarios de las salidas. También aparecen las sanciones a las que los futbolistas se exponen en caso de incumplir dichas normas.

Lluís Carreras ya había dado el domingo unas pinceladas de lo que se hacía constar en ese manual de convivencia a los jugadores con los que tuvo una charla antes del entrenamiento realizado en el estadio de La Romareda. En esa charla participaron Rubén González, Manu Herrera, Leandro Cabrera, Albert Dorca y Ángel. Ayer recibieron esas normas de convivencia por escrito todos los componentes de la plantilla zaragocista. Al técnico catalán y a sus ayudantes parece que les gusta tener todo bajo control y no dejar nada a la improvisación.