Tras una hora de vídeo, en la que Marcelino repasó el partido contra el Nástic y preparó el del Eibar, y un leve entrenamiento sobre el césped, el técnico departió durante más de 20 minutos con Gabi porque su regreso al equipo titular es la gran duda que tiene. El centrocampista madrileño, que ya jugó casi un cuarto de hora ante el Nástic, es el más indiscutible de los pivotes, pero el entrenador no quiere precipitarse en su vuelta tras superar una rotura fibrilar. Lo más probable es que juegue de salida y forme pareja en la medular con Zapater, aunque Marcelino no lo tiene decidido. Si Gabi comienza en el banquillo parece seguro que el Zaragoza repetirá el once de inicio que exhibió en el Nou Estadi.