Ángel Martín González, nuevo secretario técnico del Real Zaragoza para las dos próximas temporadas, ha calificado el reto de confeccionar una nueva plantilla para competir en la Liga Adelante como "complicado y difícil" y dado el poco tiempo del que dispone cree que éste se formará "compitiendo". "Hacer un equipo en agosto es una situación nueva para mí, es un reto complicado y difícil. Tenemos posibilidades y tenemos que empezar ya a fichar jugadores porque el equipo lo vamos a hacer compitiendo", ha manifestado en su presentación en el cargo tras el entrenamiento matinal del primer equipo en la Ciudad Deportiva. Martín González (Madrid, 1964) ha reconocido que incluso la gente de su entorno no le alienta especialmente porque "me llaman los amigos y me dicen que estoy loco".

El madrileño sabe que muy pronto la exigencia de los aficionados zaragocistas será pensar en el ascenso algo de lo que ha afirmando "no voy a hablar y menos en la situación que estamos" pero también es consciente de que el futuro de la entidad "pasa por estar en Primera y eso esta clarísimo, pero no podemos meternos más presión de la debida" aunque abre la puerta a la esperanza con el deseo de que "ojalá salga bien este año". Tras un año en paro, que ha calificado como "eterno" después de haber salido del Atlético Osasuna tras una difícil etapa, ha dicho que ahora lo que tiene ganas es de "empezar a trabajar" en un club que "con la que gente que ha entrado es un privilegio". "Estoy contento y ahora lo que tenemos que empezar es a hacer cosas y entre todos normalizar el club", ha afirmado.

En estos momentos, el madrileño se marca como "única prioridad" hacer "el mejor equipo posible y competitivo" para lo que dispone de "pocos días y poco dinero", algo que tratará de paliar con "la gente conocida que nos puede ayudar". Aunque su nombre como secretario técnico había sonado varias semanas antes en el fragor de las negociaciones por el cambio accionarial, con los nuevos responsables del equipo maño no se había reunido hasta el pasado lunes que fue cuando tuvo "la reunión definitiva y se concretó todo".

Sus primeras horas en el nuevo cargo ha asegurado que han sido "una locura" en las que ya ha mantenido una larga charla con el entrenador Víctor Muñoz y todo el cuerpo técnico para analizar todas de las posibilidades que tienen y elaborar "una lista de futuribles". "En mente siempre tienes cosas pero con poco dinero es complicado y las primeras opciones que tenemos son muy difíciles. Tenemos que encontrar el equipo cuanto antes y tomar decisiones con celeridad", ha argumentado.

Dado el mínimo número de efectivos con el que cuenta la primera plantilla, once de los que tras las salidas de Álvaro González y Paco Montañés todavía deben desprenderse de varios más, ha globalizado las prioridades para cubrir posiciones porque "son todas", aunque ha puntualizado que "la base es la portería, los centrales, los pivotes que son los que dan consistencia y seguridad al resto". Ha insistido en que el equipo lo tienen que empezar a elaborar sin esperar a que se produzcan todas las salidas para que el entrenador pueda tener "una base importante en el primer partido", a pesar de que incluso sin tener jugadores "ya estamos por encima del presupuesto". De su abrupto final en Osasuna después de diecisiete años apenas ha hecho mención, pero ha reconocido que le gusta que "respeten mi parcela" y en Pamplona no tuvo problemas "hasta el final".

Sobre el tipo de equipo que espera poder confeccionar ha reconocido que con respecto a Osasuna, donde "se premia la aptitud y agresividad", y lo que pide la afición maña existe diferencia pero ha recordado que "estamos en Segunda que es más dura en balones divididos" pero su deseo es conformar un bloque que "compita bien y con gotas de calidad tendrá buenos argumentos". El cambio en el accionariado considera que les puede favorecer en las negociaciones para incorporar jugadores porque "los agentes, que son los que "casi siempre inclinan la balanza saben quien ha entrado y ahora el Real Zaragoza va a ser un club atractivo".

También confía en que puedan estar en la primera plantilla varios jugadores de la cantera, a algunos de los cuales ya conoce sus características, pero el peso deberá recaer sobre futbolistas más hechos.