La temporada de corzo se encuentra en su mejor momento. El mes de mayo es la época del año donde se pueden observar la mayoría de las especies que buscan los bosques y los montes para esconderse. Cuando salen, lo hacen a última hora de la tarde o con la primera luz del día, a excepción de lugares donde no se les moleste. En cuanto hay demasiada luz o aumentan las temperaturas inmediatamente buscan refugio.

Para el vicepresidente de la Federación Española de Caza, Fernando Tello, "esta temporada va a ser bastante mejor que la anterior. El año pasado nos encontramos con que el corzo tenía tanta hierba dentro como fuera del bosque, por lo que no tenían necesidad de salir para comer. Ello motivaba que las esperas en las siembras fuesen infructuosas. Luego vino la época del celo, que también resultó un tanto atípica. Este año, por lo menos, la comida deberán buscarla fuera".

UN ANIMAL TIMIDO El corzo es un animal tímido, cauteloso, extraordinariamente forestal, crepuscular y muy nocturno. El cazador utiliza dos técnicas: aprovecha la salida del animal a la siembra en zonas con mayor insolación, o hace uso del reclamo manual. Gracias a este segundo sistema se consigue que el ejemplar entre a tiro, aprovechando el celo. Para Fernando Tello, "el corzo es un gourmet de la naturaleza, porque se alimenta de brotes tiernos, trigo, cebada e incluso flores".

El celo en el corzo es bastante irregular ya que sufre importantes variaciones de fecha. Hay años en los que esta especie acude inmediatamente al pitido realizado por el cazador. Hay dos sistemas: el butolo y los bucales. El primero de ellos tiene la forma de una pera de goma que al apretarse emite un grito similar al que realiza la hembra. Por su parte, el otro es más sencillo y eficaz. Se trata de un silbato con un tornillo que se modula para reproducir el grito de angustia de una cría o corcino. Con ello se consigue que acudan la madre y, en ocasiones, el macho.

Hay dos periodos hábiles para la caza del corzo en Aragón: en los machos, desde el tercer domingo de abril al primer domingo de noviembre, y en las hembras, del primer domingo de septiembre al primer domingo de noviembre.