Fernando Torres, delantero del Atlético de Madrid, recibió ayer el alta hospitalaria y a su salida de la clínica coruñesa en la que pasó la noche en observación agradeció las muestras de cariño que le han llegado. «Por suerte ha quedado todo en un susto».

El parte médico del club rojiblanco explica que Torres pudo abandonar el hospital después de que la resonancia magnética cervical a la que se sometió a primera hora corroborara que «no padece alteraciones ni lesiones traumáticas tras el golpe en la cabeza que sufrió en Riazor». La resonancia confirmó lo que había determinado «en un primer momento el TAC craneal y cervical» que se le realizó después del partido ante el Deportivo.

A la vista de esas pruebas y después de pasar toda la noche en observación, Fernando Torres abandonó el hospital, si bien «deberá permanecer durante las próximas 48 horas en reposo deportivo», según el parte médico.

A la salida del hospital HM Modelo afirmó que está «todo bien» tras haberse recuperado del traumatismo craneoencefálico. «Simplemente agradecer a todos, a mis compañeros del Atleti y el Dépor la reacción que tuvieron, a los aficionados también por su reacción y las muestras de apoyo. Son cosas que pasan», comentó el futbolista sobre lo sucedido en el partido, en el que un choque fortuito con Álex Bergantiños le hizo perder el conocimiento.

«Ayer estuve con Álex, estaba preocupado, pero son cosas del fútbol y nos pueden pasar a todos. Por suerte ha quedado todo en un susto y ahora estoy contando los días y las horas para volver a entrenar con mis compañeros», declaró Torres, que reveló que vio las imágenes y recuerda lo que pasó hasta «justo antes» del golpe con Bergantiños.

«Tuve un episodio parecido con la selección hace años, no recordaba nada durante las horas anteriores y posteriores, así que esta vez por suerte ha sido menos. Recuperé el conocimiento en la ambulancia y gracias a Dios ha sido poca cosa. Fue una acción fortuita, un golpe y no pasa nada», concluyó el delantero.