Alrededor de mil aficionados acudieron ayer a ver el entrenamiento realizado por el Real Zaragoza a puerta abierta en La Romareda. La sesión estuvo salpicada en todo momento por los cánticos del Ligallo Fondo Norte y el Colectivo 1932. Estos últimos encendieron dos bengalas y abrieron un bote con gases con los colores azul y blanco. Hubo muchos niños. Los jugadores se retiraron al vestuario aplaudiendo a la gente.