Johan Muehlegg, el fondista español de origen alemán, ganador de tres medallas de oro en los Juegos Olímpicos de Salt Late City, dio positivo en el único control antidopaje realizado con la finalidad exclusiva de localizar tanto en su sangre como en su orina la presencia de EPO o algún derivado de la hormona que aumenta el hematocrito (nivel de glóbulos rojos en la sangre) y por lo tanto mejora el rendimiento deportivo. El Comité Olímpico Internacional (COI) sólo le castigó con la retirada de su tercera medalla y le excluyó de los Juegos. Dejó en el aire cualquier suspensión a la espera del contraanálisis, cuyo resultado se conocerá hoy. Inspectores médicos del COI le sometieron a un análisis en una visita sorpresa que se produjo el jueves 21, mientras se entrenaba. En el control apareció una molécula denominada darbepoetin alfa, que se comercializa bajo el nombre de aranesp, y que triplica los efectos de la EPO. Diversas delegaciones rivales de España habían mostrado su extrañeza por el poderío, casi insultante, demostrado por Muehlegg en las tres carreras (30 kilómetros libres, persecución y 50 kilómetros clásicos) que le aportaron los tres oros en los Juegos. Muehlegg había pasado dos controles rutinarios de sangre y otros dos de orina antes de aparecer el positivo. El propio esquiador tuvo que pasar el sábado un segundo control de hematocrito, ya que en el primero superó el límite legal, antes de ser autorizado a tomar parte en los 50 kilómetros. Pese a ello, en estos controles, Muehlegg había presentado unos niveles de hematocrito que estaban al límite, rozando el 50% de glóbulos rojos permitido. Muehlegg se enteró del positivo después de recibir de manos de Juan Antonio Samaranch la tercera de sus medallas de oro. La comunicación le llegó minutos antes de acudir a una cena en su honor, que organizaba el COE. En apenas 15 minutos el fondista tuvo que comparecer ante la comisión médica del COI. Ahí proclamó su inocencia, aunque no se libró de un "interrogatorio muy duro", según declaró Gómez Angulo, secretario de Estado para el Deporte. Muehlegg, acompañado por Gómez Angulo, quien había recibido la consigna de Aznar de no dejar solo en ningún momento al esquiador, acudió al segundo interrogatorio, ayer por la tarde, hora española, en Salt Lake City. En este caso, fue Gómez Angulo quien respondió a la mayoría de preguntas, en un intento desesperado del máximo responsable del deporte español de salvar las dos primeras medallas.