Las lágrimas de Carmelo Ezpeleta, máximo responsable de la compañía Dorna, organizadora del Mundial de motociclismo, eran el reflejo de toda la sala de prensa, repleta de periodistas, fotógrafos, jefes de equipo, ingenieros y patrocinadores. No había ni una sola persona que no sintiese la misma emoción y derramase las mismas o parecidas lágrimas mientras Ezpeleta recordaba la trayectoria de Ángel Nieto (13 títulos mundiales, 90 victorias), más aún, mucho más, lo que representaba para el motociclismo español, para el deporte mundial y, sobre todo, para el funcionamiento del campeonato.

También, sí, Ezpeleta valoró muchísimo más la personalidad, la vitalidad, la pasión, la complicidad que el 12+1 campeón del mundo significaba para las carreras, para su deporte, para la marcha del paddock que sus 90 victorias y 12+1 títulos mundiales. “Porque Ángel nos ayudó a todos, a todos, a sacar esto adelante cuando este deporte necesitó de él a nivel organizativo, a nivel mundial y no solo a nivel casero, español”, señaló el CEO del campeonato.

Ezpeleta, que habló en nombre de los 2.000 habitantes del paddock, expresó su cariño hacia la familia Nieto, especialmente hacia sus hijos mayores, Gelete y Pablete, siempre presentes en el campeonato, e informó que ellos han sido los que han decidido despedirse, en privado, en familia, con sus amigos, rodeados de sus seres queridos, de su padre para, una vez cerrada la gira de agosto -Brno (República Checa), Red Bull Ring (Austria) y Silverstone (GB)--, celebrar un funeral, a principios de septiembre, en Madrid, donde todo el Mundial podría honrar a uno de sus seres más queridos.

“Lo que más quería Ángel es que siguiésemos con su deporte, que le honrásemos y recordásemos aquí, en el circuito, en la pista, entre nosotros, que era su otra familia”, explicó Ezpeleta, que informó que, el próximo domingo, poco antes de que empiece el Gran Premio de la República Checa con la carrera de Moto3, se vivirá un multitudinario y, sin duda, emocionante minuto de silencio en recuerdo de Nieto. Ezpeleta, que no dejó de sentirse visiblemente emocionado, pidió disculpas por si su voz no era la correcta “pero no es fácil para mí, no, estar hablando de un amigo que nos ayudó mucho, muchísimo, a sacar esto adelante”.