La oficina del comisionado de la NBA, David Stern, ha impuesto al escolta de los Lakers de Los Ángeles, Kobe Bryant, una multa de 100.000 dólares por utilizar una expresión peyorativa contra los homosexuales. Los hechos por los que la estrella de los Lakers ha sido sancionada ocurrieron el martes durante el partido contra los Spurs de San Antonio. Bryant, tras recibir una falta técnica, se fue hacia el banquillo y desde allí dirigió una frase despectiva con contenido negativo hacia los homosexuales al árbitro Bennie Adams, que había sido quien le señaló la sanción."El comentario de Kobe Bryant durante el partido era ofensivo e injustificable", ha señalado Stern en el comunicado oficial. "Aunque comprendo que el baloncesto es un deporte emocional, ese tipo de términos de falta de respeto no pueden ser tolerados dentro de nuestra liga", ha añadido. Stern apunta que "tanto Bryant como el resto de los profesionales de la NBA saben perfectamente que comentarios irrespetuosos y de burla hacia las personas no son aceptados ni dentro de nuestro deporte ni en la sociedad".Decisión aplaudidaLa decisión de la NBA ha sido aplaudida por parte de las organizaciones de homosexuales y lesbianas, que habían pedido que Bryant pidiese disculpas y rechazase públicamente las palabras que utilizó. Por su parte, Jos Solmonese, presidente de la organización "Human Rights Campaign", que había denunciado las palabras de Bryant, alabó la decisión tomada por el comisionado Stern."Aplaudimos la acción del comisionado Stern y a la NBA no solo por multar a Bryant, sino por reconocer que este tipo de expresiones y comentarios insultantes no son permitidos ni dentro del deporte ni en la sociedad", ha afirmado Jos Solmonese, presidente de la organización Human Rights Campaign. "Este tipo de decisiones rápidas son las que deben ayudar a no permitir bajo ningún concepto esos comportamientos negativos", ha dicho.Reacción de frustraciónAntes de conocerse la sanción, Bryant ya había hecho público un comunicado en el que afirmó que sus palabras fueron sacadas de contexto y no debían utilizarse de forma literal. "Lo que dije no debe ser interpretado literalmente. Mis acciones se debieron a la frustración que sentí en ese momento", ha justificado el jugador. "Las palabras que expresé no guardan relación con mis sentimientos hacia las comunidades de gais y lesbianas", ha asegurado.