Danila Patricia So Delgado-Pinto es uno de los mejores frutos del Balonmano Colores, la cantera de moda en Aragón que impulsó Miguel Mendo hace ya una década en el barrio zaragozano de La Magdalena. La jugadora de 15 años es un talento natural, una jugadora polivalente, inteligente, rápida, intuitiva y explosiva. Podría jugar en cualquier posición. Hasta de portera ha competido So Delgado. Aunque se mueve en su equipo cadete de Colores en la primera línea, en el Europeo sub-17, que comienza esta tarde para España en Eslovaquia frente a las anfitrionas a las 17.30 horas, la zaragozana debutará jugando de extremo izquierdo.

Tras acabar la Liga aragonesa perdiendo el título cadete ante Dominicos, Danila So comenzó el periplo con la selección en Ciudad Real el pasado 28 de junio. «Tras la concentración jugamos dos partidos con la selección rusa, ganando el primero de ellos. Tras una semana de descanso nos concentramos en el CAR de Sierra Nevada, jugando dos encuentros con la Universidad de Granada, de la División de Honor de Plata. Cada partido he jugado 15 minutos». El 2 de agosto se volvieron a concentrar en Madrid con vistas al Europeo sub-17.

Danila So define el juego de una selección española que acude con grandes aspiraciones. «No tenemos ningún líder. Todo el mundo defiende y todo el mundo ataca. Todas hacemos todo. Tenemos que tener muy claro qué hacer en cada momento. Hay mucha compenetración y yo soy nueva, pero congeniamos muy bien. Soy un año más pequeña que el resto», explica.

El primer partido contra las locales será el más comprometido. «Será el más duro de todos. Tendremos el arbitraje y a la grada en contra. Estamos en el grupo D y jugamos también contra Serbia y Noruega». La meta de España es clara. «Alfredo Rodríguez, el entrenador, nos ha dicho que el objetivo es mejorar como jugadoras y dar el cien por cien. Es mejor no pensar en medallas».

Danila estudia en el instituto Pedro de Luna. «Soy una buena estudiante y lo compagino bien con el deporte. Soy de sobresalientes y las asignaturas que más me gustan son la biología y la física y química». Lleva cinco años jugando al balonmano. «Toda la vida he practicado fútbol en el colegio Tenerías. Decidí probar el balonmano, pero mi madre me dijo que tenía que elegir uno de los deportes y me decanté por el balonmano. Siempre he tenido la esperanza de jugar con la selección española y vi que podía llegar a algo. El trabajo ha dado sus frutos». Danila So es una jugadora llena de ilusiones. «No creo que haya nada imposible. Si trabajo y me esfuerzo como hasta ahora puedo llegar a los Juegos», indica. Se define como una jugadora «veloz. Me gusta mucho defender y también atacar. En Aragón suelo hacer muchos lanzamientos exteriores. Aunque a veces me precipito», dice.

Danila So nació en Lisboa y sus padres son de Guinea Bisau. «Mis padres vinieron a Zaragoza a trabajar. Tengo dos hermanos pequeños que juegan a fútbol, uno en el Real Zaragoza y el pequeño en un buen equipo escolar», concluye.