Era una obviedad tras concluir la temporada con el Real Madrid levantando el título de Liga. Pero Luka Doncic lo dejó claro tras la ceremonia del draft vivida en la madrugada del viernes en Nueva York. «Voy a jugar en la NBA». Su frase fue, por encima de todo, una proclama. Su etapa en Europa ha llegado a su fin, después de haber cubierto todos sus retos con apenas 19 años. Ningún jugador europeo había llegado con un palmarés de tanto relumbrón: campeón y MVP de la Euroliga, campeón y MVP de la ACB y campeón del Eurobasket con Eslovenia un año antes. No le quedan títulos que añadir.
Esa es la tarjeta de presentación que le ha abierto la puerta de los Dallas Mavericks, que negociaron su traspaso con los Atlanta Hawks, que lo escogió como el número 3 del draft. Desde esa posición de privilegio hace un guiño a la historia que se vivió hace 17 años con Pau Gasol, escogido el tres por Atlanta y traspasado a los Grizzlies. Dallas también se quedó con el pequeño de los Antetokoumpo, Kostas, elegido el último de la segunda ronda por Philadelphia e intercambiado por Shake Milton.
El pívot bahameño DeAndre Ayton cumplió con todos los pronósticos y fue elegido con el número uno en el sorteo universitario de la NBA, que se celebra en el Barclays Center de Brooklyn. Ayton, de 19 años, formado en la Universidad de Arizona, que la pasada temporada tuvo promedios de 20 puntos y 11 rebotes, firmará un contrato de novato por 8,2 millones de dólares.
«Es un sueño hecho realidad», admitió Doncic, al lado de su madre, Mirjiam, que le la acompañó en la ceremonia en el Barclays Center de Brooklyn, tan feliz o más que DeAndre Ayton o que Marvin Bagley, el ala-pívot reclutado con el número dos por los Sacramento Kings. En ese grupo de escogidos entró el alero letón del Barça, Rodion Kurucs, en el puesto 40 por los Nets.
Más allá del tema económico, de los 6,6 millones de contrato que le supone su elección en el número tres, recalar en los Mavericks supone para Doncic instalarse en un entorno ideal para crecer como jugador en una franquicia con historia pero sin la obligación de ganar ya. «Estuve hablando con muchos equipos pero especialmente con Dallas. Me alegro que todo haya acabado así», reconoció el joven talento esloveno.
La confianza de los Mavericks en Doncic es absoluta, hasta el punto de que el club ha sacrificado una elección de primera ronda del próximo año con tal de incorporarlo a su plantilla. Desde el técnico Rick Carlisle, que ve en el examadridista a un titular a partir de esta próxima temporada, hasta la leyenda Dirk Nowitzki, quien, a sus 40 años, tutelará sus primeros pasos en la Liga, al propietario Mark Cuban, que lo ve como el relevo natural del all-star alemán.
UN PROCESO / «El estrellano de la NBA no sucede de la noche a la mañana. Va a ser un proceso y tenemos que protegerlo, así como estar emocionados con que juegue de la manera brillante que lo ha realizado en Europa», explicó Carlisle, que entiende que Doncic será un complemento perfecto para realizar la reconstrucción con el base Dennis Smith, de 20 años, el rookie del año 2017. La franquicia quiere ir al mercado a por un grande como Cousin o DeAndré Jordan que refuerce la apuesta. «Estoy feliz y listo para competir como el que más y aunque necesite un proceso de adaptación no tengo ninguna duda de que lo haré bien», declaró Doncic, al que muchos consideran el mejor jugador europeo que ha llegado a un draft de la NBA.
