No era Michal Kwiatkowski un desconocido, pero tampoco el gran favorito para llevarse este domingo el jersey arcoíris desde Ponferrada a Polonia. Y lo ha conseguido porque ninguno de los grandes candidatos consideró que su ataque era el letal, el firme, el decisivo. Y no lo consideró tampoco Alejandro Valverde, quizá con buen criterio, porque él no podía responder a todos los demarrajes en un circuito demasiado blando para sus características, pero el murciano estuvo allí, donde siempre, quizá no en el centro del podio como deseaba, pero se colgó de nuevo una medalla, en este caso de bronce.

Posiblemente, de haber capturado al ciclista polaco del Omega en el último suspiro tampoco Valverde habría sumado el oro porque el australiano Simon Gerrans, el mismo que lo batió en el 'oro' de la Lieja-Bastoña-Lieja, se habría llevado el mejor obsequio del Bierzo. Y, de hecho, de la plata al bronce tampoco hay tanta diferencia, una vez no se consigue la medalla de oro.

Forjado en España

Kwiatkowski, de 24 años, ya peleó hace un año por el jersey blanco de los jóvenes valores en el Tour con Nairo Quintana. Y, poco a poco, comienza a destacar como uno de los corredores con un mejor futuro como clasicómano. Formado en el conjunto navarro del Caja Rural, 'criado' en Alsasua, vigilado por Eusebio Unzué, aceptó la oferta millonaria del RadioShack para dar el salto al más alto nivel del ciclismo profesional. Un gran futuro le aguarda.

Valverde esta vez sí se entendió a la perfección con Joaquim 'Purito' Rodríguez, que fue el que abrió el paso al ataque del murciano, el que no logró capturar a 'Kwiat' pero que sí le sirvió para alejar a los velocistas. Porque si se mira la clasificación se observa que, a siete segundos del polaco y a seis de Gerrans y Valverde, el pelotón entró en la meta liderado por tres de los mejores velocistas del mundo, Alexander Kristoff, compañero de Purito en el Katusha y ganador de la Milán San Remo, John Degenkolb, el rey de las llegadas masivas de la Vuelta, y Nacer Bouhanni, que hace soñar a los franceses y a su futuro equipo, el Cofidis, con intentar dominar las llegadas en grupo en el próximo Tour.

Próxima oportunidad en Richmond

Valverde luchará por el oro el año que viene en Richmond (Virginia, Estados Unidos), como viene haciendo desde hace 11 años. Por ahora, lleva dos platas y cuatro bronces, un récord que no tiene ningún otro corredor en toda la historia del ciclismo mundial.