El Real Zaragoza y el Burgos, que milita en el Grupo I de Segunda B, llegaron a un acuerdo ayer para la cesión del rumano Razvan Popa hasta junio. La primera intención del club aragonés era ceder al central a un conjunto de la Serie B en Italia o a un filial de este país, ya que Popa tiene cartel allí tras su paso por el segundo equipo del Inter. Sin embargo, al final ha decidido que juegue en Segunda B y que tenga minutos en el Burgos, donde coincidirá con Diego Suárez.

Popa llegó al Zaragoza en el verano pasado firmando un contrato por tres temporadas, hasta el 2019. Con Milla disputó siete minutos ante el Huesca en Liga y el partido de Copa con el Valladolid. Agné no le ha dado ni un minuto a un jugador que no se ha adaptado al equipo y que, a sus 20 años, necesita mayor ritmo competitivo que el que exige la Segunda. Por eso se juzga importante su paso por el Burgos.

FICHAJES Y SALIDAS / El adiós de Popa se une al de Juan Muñoz, cedido por el Sevilla al Levante, mientras que el Zaragoza ya ha fichado a Valentín, Edu Bedia y el meta Saja. En la rampa de salida están con posibilidades de irse antes del martes 31, cuando acaba el mercado, Erik Morán, Barrera y el portero Irureta, aunque ninguna de esas salidas es fácil. Y el club quiere fichar a un lateral derecho y a un punta.