Tan importante como cerrar la llegada de nuevos futbolistas es dar salida a los jugadores con los que no cuenta el Real Zaragoza para la próxima temporada. Por una cuestión deportiva y, también y no menos importante, por razones económicas. El club contará con entre 4,5 y 5 millones de euros para las fichas de la plantilla de la temporada 2016-17 y los salarios de los futbolistas de los que quiere desprenderse y su mercado es reducido supera el millón de euros. No obstante, el Zaragoza asume que el brexit de los jugadores a los que quiere dar salida supondrá de todas formas un coste para sus arcas, puesto que deberá hacerse cargo de una parte de sus fichas. De esta forma, la paradoja es que el club aragonés debe gastar para ahorrar.

La lista de futbolistas a los que el club busca un destino alcanza la decena, aunque hay casos y casos. Hay jugadores que cuentan con mercado en la Segunda División y a los que el Real Zaragoza confía en encontrar un acomodo sin que supongan un coste, sino todo lo contrario, el ahorro completo de las fichas que tenía comprometidas para el próximo curso. Son los casos de Erik Morán, Diamanka y Pedro. También de Culio, aunque el argentino tiene la potestad de decidir unilateralmente si cumple el contrato de la próxima temporada. La entidad no pondrá ninguna pega si decide marcharse.

Después hay hasta siete jugadores por los que el Real Zaragoza asume que puede tener que pagar un pequeño precio para que no continúen y ahorrarse así una parte importante de su ficha, bien porque su salario es muy elevado, bien porque tienen menos mercado al haber contado con menos minutos de juego. En ese grupo se encuentran Abraham, Alcolea, Ortí, Whalley, Jorge Díaz, Diego Suárez y Adán Pérez. Abraham cuenta con una de las fichas más altas, 430.000 euros, y tiene contrato en vigor hasta el 2018 después de renovar y reducirse sus emolumentos, pero el club no cuenta con él. Esta temporada ya ha tenido una escasa presencia en el equipo.

La ficha de Pablo Alcolea supera los 100.000 euros, la de Jorge Ortí ronda los 150.000 euros y la de Jorge Díaz, los 170.000. Ninguno de los tres ha sido importante esta temporada, más bien al contrario. Alcolea no ha jugado, Ortí ha sumado 94 minutos en 42 jornadas y Jorge Díaz tuvo su espacio con Popovic (626 minutos, 6 partidos titular) pero en el mercado invernal se marchó cedido al Numancia y una lesión le ha impedido tener continuidad. Óscar Whalley tiene una ficha de 90.000 euros y esta campaña ya ha estado cedido en el Huesca, donde ha sido suplente de Leo Franco. Diego Suárez ha jugado en préstamo en el Lleida, de Segunda B, y tiene un año más de contrato. También cedido ha estado Adán Pérez, con una ficha de 70.000 euros, en su caso en el Ebro y con una lesión de por medio.

ÁLAMO Y FERNÁNDEZ Así, el total de las fichas de todos estos futbolistas supera ligeramente el millón de euros, una carga elevada de la que el club quiere desprenderse, aunque para ello en algunos casos deba asumir una parte del salario para buscarles acomodo, especialmente en los casos con fichas más altas, dada la dificultad de encontrar otro club que quiera asumir el coste completo al que los futbolistas, de entrada, no querrían renunciar. De esta forma, el Real Zaragoza asume que tendrá que hacer un gasto para poder ahorrarse el grueso de esos salarios, si bien el cálculo de cuánto deberá gastar y cuánto ahorrará es difícil de precisar.

El que sí está claro es el que tiene que hacer para que otros dos jugadores que tienen contrato en vigor con el club aragonés para la próxima temporada no regresen a la disciplina blanquilla. El Real Zaragoza deberá abonar 175.000 euros tanto a Javi Álamo como a José Manuel Fernández, es decir, 350.000 euros en total, para romper su vinculación con la entidad zaragozana. Javi Álamo ha estado cedido en el Girona este curso y José Manuel Fernández, en el Oviedo. Sus fichas serían, además, demasiado elevadas para el club aragonés, por lo que ya estableció en sus cesiones el pasado verano esa opción de desenganche que ahora hará efectiva. Así, la operación salida en el Real Zaragoza va a tener un coste para generar un ahorro.