Tres meses antes de que acabe la temporada, el Barça anunció el primer fichaje de la próxima. Un jugador ya comprometido en una nueva fórmula llamada «opción de compra» que se ejecutará el próximo mes de julio. Ese jugador es Arthur, un joven centrocampista brasileño del Gremio de Porto Alegre. Arthur Henrique Ramos de Oliveira Melo constará como el primer fichaje. El segundo lo será, si no hay una marcha atrás, o el Barça precipita otro anuncio, Antoine Griezmann cuando concluya la temporada. El club está dispuesto a pagar los 100 millones de rescisión y el delantero acepta las condiciones económicas de su futuro contrato.
La opción sobre Arthur consiste en que el Barça ha sellado un acuerdo para adquirir sus derechos por 30 millones de euros, cantidad que puede ampliarse hasta los 39 con una serie de condiciones también establecidas, lo que prueba la voluntad del club barcelonista de fichar a Arthur, tales como que el jugador figure entre los 30 finalistas al Balón de Oro, el Barça gane la Champions o juegue determinado número de partidos. Entre esas cláusulas se contempla el pago por la primera y la segunda renovación de Arthur, lo que prueba la voluntad de traerle.
El pago de esos 30 millones será en dos plazos: en julio y enero del 2019. Lo que todavía está en el aire es la fecha de incorporación de Arthur a la plantilla. El comunicado del Barça de hacer efectiva esa opción de compra durante el mes de julio radica en que el montante de la operación se inscribirá en el ejercicio económico 2018-19; en el actual (2017-18) ya constan los onerosos dispendios por Ousmane Dembélé (105) y Philippe Coutinho (120), además de los otros 80 invertidos en Semedo (30), Paulinho (40), Marlon (5) y Yerry Mina (11,5). Arthur pasará a ostentar ahora el récord de la venta más rentable del fútbol gaucho, en posesión antirormente de Óscar, por el que el Chelsea pagó 15 millones.
